Informe país Estado del medio ambiente en Chile: Comparación 1999-2015

279 SUELOS UNIVERSIDAD DE CHILE | 2016 5.5 CONCLUSIONES El territorio chileno ha estado históricamente sometido a procesos de deterioro de sus suelos, intensificándose en ciertos períodos de auges de exportación de granos, especialmente provenientes de los territorios de la cordillera de la costa. Los principales problemas derivados del uso inadecuado del suelo han generado continuos procesos de empobrecimiento y agotamiento, pérdidas por erosión ye incremento de los procesos de desertificación. La comparación 1999-2015 sólo pudo aproximarse en años cercanos donde se hicieron estudios de nivel nacional. Así se tiene dos estudios sobre erosión de 1979 y 2010, única posibilidad de comparación. Sin embargo, la comparación tiene limitaciones derivadas de la utilización de metodologías diferentes. No obstante ello, permite tener una idea clara de la evolución de los parámetros. Las cifras de erosión “Muy Grave” y “Grave” son mayores en 2010 que en 1979 con un aumento entre ambas de 7,4 mi- llones de hectáreas. Con respecto al proceso de desertificación se considera que afecta a un 21,7% del territorio conti- nental en alguna de sus categorías, ya sea leve, moderado o grave, lo cual corresponde a 16.379.342 hectáreas, con una población bajo riesgo de desertificación de 6.816.661 habitantes; es decir, un 37,9% de la población, distribuidas en 156 de las comunas del país. Las principales presiones sobre la conservación del suelo son las históricas: Estructura de tenencia de la tierra y el agua desequilibrada, técnicas productivas ambientalmente poco sustentables, deforestación, manejo ganadero extensivo con numerosos territorios sobre explotados, expansión agrícola hacia áreas frágiles en especial con pendientes, incendios. Las repuestas han sido diferencias. En los impactos positivos reales: Primero, el proceso de plantaciones forestales ha tenido un manifiesto impacto positivo, disminuyéndose los porcentajes de erosión de las comunas donde la forestación ha sido significativa. Segundo, han ocurrido cambios tecnológicos que han frenado los procesos de erosión, en especial la expansión del riego tecnificado. Y tercero: el programa de incentivos a la recuperación de suelos degradados ha permitido incorporar nutrientes al suelo y implantar algunos sistemas ambientalmente más sustentables. Sin embargo, este progra- ma no ha tenido el programa esperado, y para muchos es sólo considerado un subsidio encubierto. Las otras repuestas, no han tenido impacto o han sido marginales. Los instrumentos reguladores del uso del suelo con frecuencia han frecuentemente vulnerado. No existe en el país un ordenamiento del territorio vinculante que obligue a un equilibrado uso de los territorios nacionales No obstante las medidas tomadas, se estima que el 2015 hay más territorios erosionados en el país y más suelos en pro- cesos de agotamiento.

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=