Cosmografía y otros escritos de divulgación científica
Naturaleza American11 dijimos arriba, arrastrar la piragua; el sitio en que es necesario hacerlo, arrastradero. Se confunden generalmente, bajo los nombres vagos de cataratas, cascadas, saltos, raudales, pongos y otros, cosas muy diferentes. A veces se precipita un río entero de una grande altura por una sola caída, y hace toda navegación imposible. Tal es la soberbia cascada de Tequendama; tales las de Niágara, del Rin, mucho menos notables por su ele- vación, que por el caudal de aguas que llevan. Otras veces sucede que hay una serie de diques de piedra, poco elevados, a corta distancia unos de otros: tales son las cachoeiras del Río Negro y del río de la Madera, los saltos del Cauca, y la mayor parte de los pongas del alto Marañón. Sucede tam- bién a veces que estos diques se aproximan tanto entre sí, que forman por muchas millas una serie no interrumpida de chorros y remolinos y éstos se llaman propiamente rau- dales, como los del Missouri, que tienen cuatro leguas de largo, y los de·Atures y Maipures, únicos que en la región equinoccial del Nuevo Mundo están ataviados de una, mag- nífica vegetación de palmas. Sucede, en fin, que el movi- miento tumultuoso de las aguas proviene de estrecharse con- siderablemente el cauce, como en el pongo de Manseriche, del Marañón, y en la Angostura de Carare, del Magdalena, estrecho que embaraza la comunicación entre Cartagena y Bogotá. Los raudales del Orinoco, tan eminentemente pintores- cos por la distribución variada de las aguas, rocas y palmas, al paso que las cascadas, como la de Tequendama o Niágara, ofrecen un solo cuadro, admirable sin duda, pero único, no t ienen probablemente en toda su longitud más de 28 pies de altura perpendicular. Su fracaso se oye a más de una legua de distancia, y es tres veces más fuerte de noche que de día, dando a estos apartados desiertos cierto atrac- ti'7o, cierto encanto que no puede expresarse. Atures y Mai- pures están entre los 5º y 6° de latitud boreal, cien leguas al este de las cordilleras de Cundinamarca, y a 12 leguas de 314
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