Heroísmo sin alegría

52 requiere precisamente una gran voluntad de miíenarios, dominio de siglos, dominio de vinos en madurez perfecta; es el horror animal de aquel que se engendró y se pa– rió y se crió matándose. Recuerdo al araucano absorto y al caste– llano activo, creyente, y al estremeño de aventura, acorazado, al vascuence ultl'a• marino mamando de las tierras ásperas, mamando de las cordilleras y las calich(>• ras y las costas heróicas y los campos. los campos aciagos, gran alimento de energía. Y observo al pobré criollo sin alma, pa– triotero y oratorio, salvaje, cobarde y re· dundante, en quien la civilización es vi– llanía, en quien la civilización es porque– ría y la cultura estafa de judíos arribistas, observo al pobre criollo sinvergüenza, orgu– lloso de producir snobs intermediarios, ob– servo al pobre criollo y sus periodistas y sus diputados y sus académicos, lo cochi– no de lo cochino, gritando con los mocos caídos: "¡viva Chile, mierda!. .."· Dignificando la masa ramplona del fi. listeo, asoman a la raza Juan Francisco González, Manuel Ortiz de Zárate, Abe– lardo Paschin Bustamante, Alvaro Gueva– ra, Humberto Allende, Tótila Albert, Vi-

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