La industria azucarera en Chile: y establecimiento de una nueva fábrica nacional de azúcar de betarraga en Santa Fé

U DIDUBTBIA ilU<WUIJ.4 D OJIILB 18 M.ni satisfactorio ha. sido para nosotros el ver comprobado de una. manera tan fehaciente el éxito de un cultivo destinado a producir considerable i benéfica modificacion en la esplotacion del suelo. Los agricultores todos, como nosotros, aplaudimos la dedi~ion i constancia. del sefior Hatte, que, olvidando las si– niestras tradiciones do esta industria en Chile, inicia su renaci– miento con la instalacion de su OO>rice. con comploto éxito. Con las a.puntaciones que anteceden, creemos ha.her llenado nuestro encargo¡ pero juzgamos oportuno consignar en eate in– forme algunas observaciones que el estudio anterior nos ha su– jerido. Es la primera reíerente a.l cultivo de la betarraga, i al método mas conveniente de hacer esta esplotaeion del suelo. El cultivo dilata.do hecho por el propietario del suelo, presenta ditlcultadea serias por h\ ca.ntida.d de brazos que exijo la preparacion esme– rndlsima. del ca.Dipo á.ntes de la siembra, condicion necesaria pam una semilla tan pequeda como la de la betarraga. Las labo– res cont;nu_adas i profundas que necesitan las pln.ntaa tubercu– losl\8¡ el raleo de las plantaa nacidas, que solo puede verificarae a m1U10¡ las limpia.a subsiguientes necesarias al buen desarrollo de la. siembra, exijan el empleo de una CR.Dtidad de brazos mui considerable, que es dificil obtener con la oportunidad necesa– ria para un cultivo considerable, i mucho mas cuando el propie– tario tiene que atender i realizar en la misma época. otnla labo– ros en su campo. Todo aconseja, a nu~trojuicio, hacer el cultivo de la betarraga por medio de chacareros i por cµenta de ellos. El rendimiento obtenido por cuadra. se aumentaría mui considerablemente, cuando impulsados por el lucro personal, los cultivadores de una á.rea. pequeffa de terreno constantemente labrado, dedicaran a esta planta la atencion i esmero con que cultivan las papas. En los datos mismos que hemos apunta.do mas arriba se vé comprobada nuestra a.severacion. La mui pequeña siembra. de ensayo (1 hectá.rea) hecha. por el setlor Lanz di6 un resultado en bruto superior en 50 por ciento a los cultivos mas dilo.tndos de Buin i Guindos; de modo que aunque los gastos ocasionados fueron mucho mayores (148 pesoe en vez de 110), i a pesar de