La industria azucarera en Chile: y establecimiento de una nueva fábrica nacional de azúcar de betarraga en Santa Fé
LA INDUBTIUA AZUC.BBBA. U CHILB 121 con arreglo a uM tariía. especial mas baja que todas las que de– talla la clasi6cacion vijente, i cuyo monto apénas excedier~ del costo calculado parR. los gastos de acarreo. Asl i 11010 asl podrían implantR.l'88 con fruto considerable n6mero de industrias que por su naturaleza no pueden utilizar la fuerza hidráulica i cuyo establecimiento beneficiaria en jeneral al pais, i levanta.ria la agricultura nacional enca.rgada las mas veces de sumiuistrarle la materia. prima. Fuera de las coDSideraciones espuestas que se relacionan con el progreso industrial, juzgamos, señor Ministro, que obra en a.bono de la. rebaja indicada la circunstancia que el carbon mi– neral, es, para. loa ferrocarriles, Cl\rga de entrada, esto es, cMga que se moviliza de la costa donde residon las bulleras háoia el interior, siendo escasa la carga que en ese sentido se trasporta., i permitiendo esta circunstancia que los trenes numerosos que acarrean loa cereales i otros productos a los puertos de embar• que hagan un flete de retomo con el carbon internado. La conveniencia de que la industria pueda contl\r con abun– dante i barata proviaion de ca.rbon de piedra podemos decir que ha sido reconocida de una manera evidente por los Con· gresos i Gobiernos que han tenido en sus manos la direccion del país i que han hecho siempre especial aituacion 1\ este arti– culo decla.rá.ndolo libre de todo derecho de internacion, siendo que en nuestro sistema aduanero toda, mercaderla. debe cubrir un puesto de internaciou, de tasa variable, en relacion con su va– lor o con su empleo. Ni en momentos de apuro para el Erario Nacional ae ha alterado esta aituacion, a pesar de que nuestro país tiene la íortuna de contar con abundft.ntes hulleras en su territorio. La propiedad de los ferrocarriles nacionales da al Estl\do un medio poderoso de impulsar el movimiento econ6mioo del país. Teniendo en su mano la fijacion de las tarifas de trasporte, pue– de decretar la prosperidad de la industria azucarera i otras análogas para cuya instala.cion sea nuestro suelo conveniente. La rebaja en los fletes ni siquiera importará. d!J3minucion en los ingresos do la empresa portoado1-a, pues respecto de los ar· Uculos que hemos enumerado, en unos casos eaa diaminucion
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