La industria azucarera en Chile: y establecimiento de una nueva fábrica nacional de azúcar de betarraga en Santa Fé
120 LA 11'DUSTBIA A.ZUOARBRA U OBIL& Existen los yacio1ientos de carbon, o al ménos están solo en esplotacion las hulleras ubicadas en ttna zona mui limita.cla de territorio i vecina al mar, de modo que toda manufactura esta.• blecida en nuestras provinciRS centrales i del norte o radicada léjos de la costa tendrá que recibir el nrtfculo recargado con &l flete de mar o de ferrocarril o con uno i otro como sucederá las ma.s veces. Las fábricas de azúcar tendrán siempre que buscar su ul,icn.cion en los valles que contando con una via férre11, sean aparentes para el cultivo de In plantn que los suministra la ma– teria prima; as( es que i-ecibirá.n siempre el carbon de piedra recargado con el ftoto do acnrreo do muchos kilómetros. Así acontece hoi que unn tonelada de carbon nacional que en Lota o Coronel valo 7 $ tiene un precio de costo en la fábrioo del llembrillo (Parral) de 10 $ i en la de los Guindos (Buin) de S 11. Hemos espl'csndo ántes In.a diferenciRS que exi11ten ontre el floto o porto pn.gndo en los forrocnrrilos alemanes i los nuestros respecto do la betarrngn., manifestaremos aqui que la ta.rifa. de 6.• clnso que pn.ga el c1\l'bon en cn.rro completo os en Chile mas do tres veces mnyor que en Alemania. Asi un quintal métrico de esta sustancia, trnsportn.do do Hanover a Berlin paga 61 centnvos, i de Tn.lcahuano nl Membrillo 221 centavos, siendo la. distancin. recon·ida en ambos trayectos enteramente igual: 266 kil6metros. I nótese que en casi todos los estados europeos cuenta la in· dustrill con otro medio de trasporte mas bajo, cual ea el que le ofrece la nnvogncion de los rios i la vasta red de canales abier– tos con gran costo i en.si csclusivamcnte por obr11 de los Gobier– nos. Es sabido que el tra.,porte por agua es ol mM econ6mico i por consiguiente el que acarrea jenorrumente las maderas, leña, carbon i toda cnrga de mucho volúmon i poco valor. No contamos ni contnremos con canales semejantes, pero nos favorece para movilizar nuestros productos la estrechez de nuestros valles que al ser cortados por las lineas férreas existen– tes deja no ltíjos de los rieles la mejor i mas cultivada zona del pa18. A nuestro juicio, el carbon do piedra debería. sor trasportado
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