Tres reformadores: Lutero - Descartes - Rousseau

TRES REFORMADORES 99 espíritu, se comporta como el ángel q~e ac co- noco a sí mismo y a su tlutor. Mi pensamiento existe, Dios existe. De aquí se desprende todo . Desde Dios la ciencia carte- siana desciende a las cosas, y deduce la Física. Ciencia perfecta o por las ·causas, la única pro- porcionada a la ambici6n del fi16sofo . Ella co- noce también este universo a priori, y según el orden mismo de las razones creadoras (Y si ella fracasa en su tarea, será para pasar la mano a la metafísica de Spinoza). tEepera algo de los sentidos, por-que al fin de cuentas no se olvida completamente de que somos hombres} Los sentidos no tienen sino un papel accidental, en particular el de operar una elección entre las di- versas ~ombinaciones ideales igualmente posi- bles, y mostrarnos cual ha sido realizada de hecho. Así se nos aparece en su primera manifesta- ción la independencia de la raz6n cartesiana con respecto de las cosas: separación de la inteligen- cia y de los sentidos, por los cuales la inteligen- cia se encontraba en continuidad con las cosa3, con lo singular existente. Desprecio del cuerpo en la obra de fa ciencia, rechazo del conocimien· to animal que nos liga primero a la creación . Rechazo de esta condición propiamente huma• na de no poder conocer sino por los sentidos y el intelecto juntos lo que el ángel conoce por el intelecto eolo. Ved quitar la3 amarras a esta her- mosa ciencia . ( Está ba6tante se¡ura de sí mis-