Tres reformadores: Lutero - Descartes - Rousseau
220 JACQUES MARITAIN esclavos sino como personas libres . En efecto, se llama libre a aquel que es "causa de sí", esto es hecho libremente por nosotros que operamos por nosotros mismos ( ex nobis ipsis) : y es lo que hacemos por nuestra voluntad. Pero lo que hacemos contra nuestra voluntad, lo hacemos como esclavos, no como persona libres, ya sea que se nos imponga una sujeción absoluta, ya sea. que la sujeción se mezcle a lo voluntario, como cuando un hombre quiere hacer o sopor- tar lo que contraría menos su voluntad, para es- capar a lo que la contraría más . Pues bien, por lo mismo que infunde en nosotros el amor de Dios, haciéndonos obrar s~gún el peso mismo de nuestra voluntad, el Espíritu de Santidad nos inclina a actuar. Porque lo propio de la amistacl es que el amigo esté al unísono con el amado en las cosas que éste desea). Los hijos ele Dios son conducidos por el Espíritu de Dios libremente por medio del amor, no servilmente por el te- mor: No habéis recil,ido un espíritu de servi- dumbre para estar aún en el temor, sino un es- píritu de adopción, conforme al cual gritamos: ¡Abba ! i Padre! "Ahora bien, puesto que ha sido ordenada su naturaleza hacia lo que es verdaderamente bueno, cuando un hombre bajo la influencia de una pasión, de un vicio o de una mala disposi- ción. se aparta de lo que verdaderamente es bue- no, este hombre, si se considera el orden esen- cial mismo de la voluntad, obra como esclavo,
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=