Tres reformadores: Lutero - Descartes - Rousseau

136 JACQUES MARITAIN lo sublime. a una llama de genio que aparece en sus ojos admirables. una impotencia extra- ordinaria de las funciones por las cuales el hom- bre domina racionalmente lo real: en el orden especulativo, todo esfuerzo de construcción ló- gica y coherente es para él un suplicio, "sus ra- zonamientos diferentes no concuerdan . nunca sino eri la cadencia de su queja" (a), y, sobre todo, en el orden práctico, la voluntad como fa- cultad racional es nula en él. Realizar un dictamen de la razón, hacer pa- sar en el ser, en su propio ser actuando, una de- terminación juzgada buena, esto le es imposi- ble: privación casi total de e ste acto de la razón práctica.,,que la psicología tomista llama el "im- perium", y por el cual la inteligencia bajo la moción de la voluntad, ordena a las facultades de ejecución, por un "fiat" definitivo, introdu- cir en el temible mundo de la existencia lo que ella juzgó deber ser hecho. En cuanto al juicio moral mismo, es a menudo bastante bueno, aun excelente en él, por lo menos el juicio "especu- lativo", que lleva al consultar su amor a la vir- tud; t y quién es el hombre que no ama la vir- tud, que no la encuentra hermosa y buena? E11 éste un efecto de las inclinaciones esenciales de la naturaleza humana, y es el motivo por qué nos sentimos impulsados a exigir tan natural- (a ) Charlee Maurra.s, ltom<1tillcútno .11 Rewaluol6t1 , pr~. r a c io it" la edición definitiva.

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