Tres reformadores: Lutero - Descartes - Rousseau

102 J AC QUES MARITAIN tela común del ser, sino que por una sola de sus ideas comprensivas agotan toda la realidad de un sector de la creación. En cambio el reemplazo de la resolución en el ser por la reducción a las naturalezas simples, en el pensamiento para las cosas del alma, en la extensión y el movimiento para las cosas del cuerpo, no puede sino provo- car estragos incalculables en un entendimiento que permanece, tenga lo que tenga, discursivo, y cuyo único trabajo consiste en progresar por composición de conceptos . Lo que introduce aquí la revolución carte- siana, es nada menos que un cambio radical en la noción misma de la inteligibilidad, y, correla- tivamente en el-tipo mismo de la intelección y de la "explicación" ciendficas. Incapaz por principio de comprender la ana- logía del ser y usar de ella, y cerrándose desde un principio a las cosas divinas, el análisis carte- siano, partidor y nivelador, no hace sino romper la unidad interna de los seres, destruir la origi- nalidad como la diversidad de las naturalezas y lleva r todo brutalmente a los elementos unívo- cos que se ha complacido en elegir como princi- pios simples. En lo sucesivo, comprender es se- parar; ser inteligible es poder ser reconstruído matemáticamente. Desmontar un mecanismo y volverlo a montar, he aquí la obra viva d e la in- teligencia . La explir.:ación mecanicista llega a ser el úni_co tipo concebible de explicación cientí- fica .

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