Moluscos marinos en Chile. Especies de importancia económica: Guía para su identificación

VARAZONES ESPORÁDICAS DE MOLUSCOS Científicos chilenos han registrado en numerosas oportunidades en lascostos de nuestro litoral la presen· cia de varazones de moluscos (almejas, machas, jibias). Estos hechos por lo general no han sido descritos en la literatura científica. Estos fenómenos naturales, algunos aun sin explicación, están mostrando una visión gene- ral de los volúmenes y altas densidades de los bancos de moluscos que viven en o sobre los sustratos marinos, o en otros casos las grandes concentraciones que al· canzan los cardúmenes de cefalópodos. Los únicos registros de la literalura científica en Chile están referidos a los cefalópodos, De Buen (1957) menciona que "las varazones de jibias son normales en estas costas, y se repiten sin aporente periodicidad a lo largo de las costas de todo Chile". El artículo men· ciono además registros de varazones de jibias en: fe- brero de 1895 y 1916, marzo de 1930, junio de 1951, noviembre de 1953. La mayoría de estas ob- servaciones fueron realizadas en el litoral de Concep- ción. En Chiloé también eran frecuentes y sus habitan· tes utilizaban las jibias como abono en sus cultivos de popes. Estas varazones estarían relacionadas con las Ira· mas tróficas en el medio marino, produciéndose una persecución múltiple de origen trófico, y grandes con· centraciones deejemplares dediferentes especies, oca· sionando un alto consumo de oxígeno que, junio a factores topográficos de estas áreas, provocan la mor· tolidad por asfixia y la consecuente varazón de peces y moluscos. Hace unos 15 años atrás en las costas de Valporaíso, según L. Ramorino y B. Campos (comuni· cación personal) se observó una varazón de almejas (Mu/inio sp) en Cancón (mayo 1983 · 84) Ellos infor· man que ' la cantidad de ejemplares varados era im· presionanle y una gruesa capo de almejas que se ex· tendía por varios metros de lo ploya ubicado al norte de la desembocadura del río Aconcagua, donde la gente cargaba sacos y sacos que transportaban en camionetas.'. Se ha sugerido en este caso que la varazón sería el resultado de fuertes marejadas de fon· do que arrastraron los moluscos desde los bancos del submareal hacia la costa. En abril de 1993 en Chiloé se observó huellas de una varazón de machas ocurrido con varios meses anterioridad, ya que solo se observaban conchos vacías (com. pers. N. Piwonka). En marzo de 1999, González el o/. (200 l ). informan varazones de ostio- nes (Argopecten purpurotus Lamarck) en las playas de la Bahía de Tongoy como resultado de un período de fuertes oleajes y la facilitación por algas epibiontes adheridas a las valvas de los ejmplares varados. Re- cientemente, en abril de 2002 se observó en Corral una varazón de sardinas y jibias. Fenómenos semejantes también han sucedidoen el pasado, ya que actualmente es pasible encontrar •coquinas• que posiblemente sean muestra de ello. Las •coquinas• son formaciones de origen reciente, que pue- den ser observadas en varios puntos próximos al litoral costero, como por ejemplo en la playa al norte de La Laguna en la V región (32 2 37' S). en el camino longitudinal al norte de La Serena (292 47' S) . Allí se encuentran conglomerados, sólidos, calcáreos, como piedras blanquecinas. Estas coquinas son generalmen· te el resultado de grandes acumulaciones de conchas de moluscos de diferentes edades, comprimidas, mez· ciados y consolidadas por la precipitación de carbo- nato de calcio o la cementación de la calcita cristali· na que, junto a la acción microbiana, van uniendo los fragmentos de conchas, rellenando los espacios y l i jando las conchas, para formar una roca calcórea detrítica, donde es pasible reconocer perfectamente las especies que forman estas estructuras (Petti john, 1957).

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