La realidad médico-social chilena

CRITICA DE CONJlJNTO A LA LABOR DE LOS SERVICIOS MEDICOS. Realizado en capítulos anteriores, en forma aislada, el análisis de la labor de nuestra principales instituciones sanitario asistenciales, pa- samos ahora a dar una mirada a su acción médica en conjunto. La defensa de la salud es efectuada por organismos que se han formado en épocas diversas, con criterios muy diferentes y que se han desarrollado ignorandose, de manera que, en muchas ocasiones, se evi- dencia en sus actividades un espíritu de rivalidad o por lo menos de aus_encia de cooperación. Decíamos, a nombre de la Asociación Médica de Valparaíso, el año 1937: "La tradición, los hábitos inveterados, el temor de las innovaciones profundas y en no pequeña parte los intereses creados, mantienen a cuatro grandes organizaciones aferradas a principios arcaicos haciendo la misma lucha contra la enfermedad y tratando de mejorar las condi- ciones higiénicas del medio ambiente desde cuatro puntos aislados; todas autónomas, en su mayoría excesivamente individualistas y con arrestos medioevales en sus dominios". Hoy podemos, por desgracia afirmar, lo mismo, casi con igual exac- titud. Las actividades sanitarias están entregadas a la Sanidad Fiscal y a las Municipalidades. La primera permanece estagnada, sumida en montañas de papel, sin recursos económicos, sin material ni personal adecuados estando, por estas causas, imposibilitada para cumplir en bue- na forma su labor específica. La Sanidad Municipal, en manos de 218 Municipalidades, es m~f!ejada con un criterio caciquista y eledoral, que en este caso reemplaza al técnico. Su dispersión determina su absoluta esterilidad. Entre ambas, la Sanidad Fiscal, Estado Mayor sin soldados y Sani- 1 11 -

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