Bicentenario de Hispanoamérica: Miranda escritor
21 "La crítica del sistema y los vicios que adquirió rápidamente la República, hecha por Bolívar, está [...] ampliamente justificada, y, por coincidencia que pudiera llamarse irónica y hasta hoy nunca señalada [1939], aparece como la mejor defensa de las opiniones y propósitos expuestos por Miranda en el Congreso y en el cuartel general" 27 . Miranda luchó denodadamente contra los males señalados por Bolívar, en medio de toda clase de dificultades, indisciplina, divisiones e intrigas y calumnias de parte de sus compatriotas. Bolívar fue absolutamente injusto con Miranda. Si en los primeros días de julio dice que la patria ―se ha perdido‖ en sus manos, ¿cómo puede veinte días después acusar a Miranda de haberla perdido? Y ¿cómo puede en noviembre del mismo año, en Bogotá, acusar de cobardía e incompetencia a Miranda, insistiendo en que éste perdió a Venezuela, y al mes siguiente enumerar nueve causas del desastre, ninguna de las cuales es atribuible al Precursor? El afán de exculparse de aquello de lo cual se había autoinculpado llevó a Bolívar a cometer tamaña injusticia, y a insistir en ella, cegado por la pasión. Y quizás ese mismo afán esté en la raíz del hecho de que haya omitido la caída de Puerto Cabello al enumerar las causas de la caída de la Primera República. La toma de esta ciudad y su fortaleza, con gran cantidad de armas y pólvora, por los realistas, fue una de las causas del desastre de Venezuela, aunque no la única. Pero el futuro Libertador la silencia en su análisis. Pero también es injusto decir como no pocos historiadores han afirmado, y como a menudo se repite livianamente, que Bolívar entregó al Precursor. Nunca tuvo esa intención, sino la de juzgarlo y castigarlo por lo que en ese momento, en su injusto y apasionado juicio, estimaba una traición. 28 . 27 C. Parra-Pérez, op. cit., II, 407. 28 Verdad es que el jefe español vencedor, Domingo de Monteverde, le dio pasaporte para que saliera del país, diciendo que así lo premiaba por la captura de Miranda, y que en esos términos dio cuenta al Rey. Pero en la entrevista en que el jefe español afirmó eso, Bolívar reaccionó enérgicamente, negando la entrega, y poniendo en peligro la entrega de su pasaporte y su persona. La intervención rápida e inteligente del amigo peninsular que lo protegía, don Francisco Iturbe, salvó la situación. Felipe Larrazábal, músico e historiador, biógrafo del Libertador, oyó del mismo Iturbe la narración de la escena en que Monteverde dijo a su secretario: "Se concede pasaporte al señor (mirando a Bolívar) en recompensa del servicio que ha hecho al Rey con la
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