Bicentenario de Hispanoamérica: Miranda escritor

114 Orrego Vicuña destaca en ambos próceres la consecuencia con los principios libertarios: ―De pocos hombres –dice, refiriéndose al Precursor- podría afirmarse que supieron ser tan leales a la finalidad de su destino» 181 . Y cuando sigue el curso de los acontecimientos de 1810, el historiador comenta la difusión en Chile de las noticias relativas a la jornada del 25 de mayo en Buenos Aires: «Cuando la noticia de acontecimientos tan trascendentales llegó a Concepción, el corazón de O‘Higgins debió estremecerse de gozo. Palpitaría en sus venas la fiebre de nuevas acciones, y su pensamiento hubo de comulgar con el de Miranda. Muy pronto el discípulo alcanzaría la altura del maestro» 182 Sobre el carácter de mentor directo de O‘ Higgins que tuvo el prócer venezolano, las palabras de aquél son precisas. El 1º de septiembre de 1828, escribe desde Montalbán al almirante Ardí: «A Miranda debí la primera inspiración que me lanzó a la carrera de la revolución para salvar a mi patria» 183 . Con expresiones igualmente rotundas, O‘Higgins había expresado esa idea al coronel Juan Mackenna, diecisiete años antes, el 5 de enero de 1811. En carta a su amigo irlandés, le confiaba que había tenido el temor de verse apresado y enviado al Perú, lo que lo habría sustraído a la acción por la independencia de su país: «No puedo ocultar a V., sin embargo, cuán doloroso me habría sido el yacer impotente tras las rejas de los calabozos de Lima, sin haber podido hacer un solo esfuerzo por la libertad de mi patria, objeto esencial de mi pensamiento y que forma el primer anhelo de mi alma , desde que en el año de 1799 me lo inspiró el general Miranda. Como tengo la esperanza de abrazar a V. Muy pronto, reservo para entonces el referirle cómo obtuve la amistad de Miranda, y cómo me hice el resuelto recluta de la doctrina de aquel infatigable apóstol de la independencia de la América española». 184 En cuanto al concepto que el Libertador de Chile tuvo del Precursor, las palabras que hemos citado son elocuentes al respecto. Se ha dicho, incluso, que quiso escribir una biografía de Miranda, pero las 181 E. Orrego Vicuña, op. cit ., 59. 182 Ibid., 72. 183 B. Vicuña Mackena, op.cit ., 155. 184 D, Barros Arana, op. cit., 561.

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