Mujeres de la tierra

Emplazamientos lJll<: pcm1itcn la ci rcu lac ión de las relaciones entre semejant es, recintos de la camader ia que gestarán los lazos afectivos entre hombres y muje- res. La movilidad al interior del tejido urbano será entonces para las muje res, desde los lugares de traba· jo a las residencias de los parientes y de ah í a los rin· eones qlle la etnía puebla. Los días de salida tendrán su corolario en la parti cipación festiva en estos pun· tos de contacto que dividen la ci tJdad. imperceptible· mente, entre el mundo que habitan los huincas y el llnivcrso en que se despliegan los mapllches La Emergencia del Conflicto Nos vinimos a vivir aquf a fa cooperativa y empe- cé a tener mis hijos; pero me pasó lo siguieme: cuando estaba esperando al Simón, me daban, no sé si serian los nervios. el hecho es que una vez fui a la ferW y de repente vi todo nublado. Al otro d{a fui al médico y no me encontró nada; no era la presión, ninguna cosa y cada vez que salí me suced(a eso, algo terrible. Entonces. le escrib{ a mi mamci y le conté lo que me pasaba. ¡ Yo tenia unas pesadillas!; una vez, es taba durmiendo cuando de repente me dan una palmada y al despertar tenia un dolor: le mandé a mi mamá una pieza de ropa, me fleiiÓ esa ropa donde una machi, alld en Truf-Truf: la machi mandó a decir que tenía que hacerme remedio. si no, iba a sonar. Y fui a verla en enero. Alid me vio de nuevo en una pieza de ropa

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