Mujeres de la tierra

dujo el •·azar", la ' 'suerte". Experiencia que no se ti•'c de negatividad. situación asumida sin generar problemas El grupo familiar se arma asumiéndose ell a como la ' 'ducna", como la encargada del cont rol y distribución de las tareas Al in terior de l discurso "materno". la entrega de la educac ión formal a los h ijos-sobrinos es el centro desde el cual se dinami za la producción y reproducción econó· mica. El "bien" educación. es vis to como una posibili dad para recuperar la " inversión" de trabajo y energla que se ha gastado en la crianza de los ninos. l os esfuer· zos de la mujer se encaminarán a proporcionar a sus hijos este instrumen to 44 Así, la muje r asume junto a otrn (su prima) la totali- dad de los procesos productivos: el trabajo agrícola. ganade ro, la tcxtiler (a. la cr fa de animales menores. la huerta. l os hijos varones ayudarán a la consecusión de ellos, pero es la mujer quie n administra los recursos Su d iscurso conjunta su posición: " la mujer hace Jo mis- mo que el hombre". Ella se apropia de una identidad culturalmente asignada a lo masculino a partir de su práctica cotidiana, del mantenimiento de un orden de subsistencia que implica una división sexual del trabajo dentro de los grupos fami liares. que es proyectado por ella al asumir las funciones de un hombre y que se expresa en una doble arrogación: trabajar como un hom- bre siendo mujer Es ta apropiación de la iden tidad da rá a la mujer una conciencia que va más allá del problema ind ividual dr su inmersión económica, que se expande para asi r el con- junto de problemáti cas que en frenta el "agriculto r mapuche". l a desc ri pción de la vida rconómica y sus dificultad('S se focaliza en un relato que hace suyo el prvblema de la subsistencia.

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