Del biombo a la cátedra: igualdad de oportunidades de género en la Universidad de Chile

Del Biombo a la Cátedra. Igualdad de Oportunidades de Género en la Universidad de Chile 139 embargo, no se brindan los apoyos materiales para que se lleven a cabo ni se cuenta con la presencia de autoridades universitarias en ellas: “Pero a mí me ha costado muchísimo poder involucrar a la Universidad de Chile, tanto en términos de recursos, que sería lo ideal, pero igual pase, sino también en las actividades. O sea yo recibí muchos más entusiasmo por parte de Comunidad Mujer, que de las mismas académicas cuando traté de contactarlas, para hacer cosas sobre mujeres y liderazgo” (Académica, FACSO) Uno de los elementos que, paradojalmente, dificulta que haya una percepción de desigualdades por género entre los estamentos, es que se trata de un concepto que es políticamente correcto. En efecto, la equidad y la perspectiva de género han estado en la palestra hace ya algunos años. Primero fue internacionalmente, por medio de una serie de acuerdos que obligaron su inclusión en diversas áreas, desde las legis- laciones nacionales hasta las propuestas para fondos concursables. Luego fue en el país, no solo porque se incorporó la perspectiva de género en las políticas, programas y planes estatales de forma obligatoria, sino que, además, porque la primera mujer presidenta —Michelle Bachelet— posicionó estas inquietudes a nivel nacional. De esta manera, nadie podría decir, hoy en día, que las temáticas de género son irrele- vantes o imprescindibles sin caer en una falta moral grave: “Estamos hablando de la U de Chile y es que yo creo que estamos en una escuela en que en primer lugar el tema de la igualdad ha cobrado importancia porque de partida somos los promotores y educadores de las bases fundamentales que regulan y que garantizan las libertades y principios de igualdad, formamos nuestros chiquillos educándolos profesionalmente en la comprensión de lo que son garantías constitucionales” (Académico, Fac. de Derecho) Considerando todo lo anterior, no es de extrañar que al preguntar a académicos(as) y funcionarios(as) sobre la relevancia de una Oficina de la Igualdad en la Universidad, estén de acuerdo y manifiesten entusiasmo. Sin embargo, tampoco es de extrañar que al entusiasmo inicial le siga el establecimiento de otros intereses más prioritarios para la equidad en la Universidad, entre ellos las formas de contrataciones y las re- muneraciones, pero también la sobrecarga en las tareas administrativas: “Hay una cosa más que de género, yo considero que en la Chile hay una discriminación de clase” (Académico, INTA) “Temas de género, efectivamente, pero género en amplio sentido. Otro tema importante tiene que ver con esta desigualdad en los contratos, es invisible pero es brutal” (Académico, FAU)

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=