Memoria histórica sobre la revolución de Chile : desde el cautiverio de Fernando VII, hasta 1814

t7&, llllMOW HISTÓRICA triunfo como si realmente fuera verdad lo que re fi e re el Jeneral en los si­ guientes términos. Exmo. Sr. Ayer me hallaba a una legua de San Carlos con todo el ejér­ cito de mi mando , cuando se me avi ó que el enemigo emprendia su marcha, lo noche áotes le babia intimado la rendicion y conte tó Pareja con la arrogancia propia de un andaluz; pero contestó así, porque creyó retirar e impune. Inmediatamente destaqué sobre ellos la vanguardia, que aun no babia salido del pueblo, cuando empezó una accion vivísima ( fal­ sedad, pues no fueron vistos hasta media legua mas acá de San Carlos) sostenida por Lodo el ejército enemigo que se retiró mas <le una legua (siguió la marcha ele su viaje) obligado de nuestra pequeña fuerza quo consistía en 200 nacionales , 50 granaderos, 100 milicianos y <los cañones de artillería. El enemi � o escojió un punto ventajoso y con su numerosa artillería empezó un vivo fuego que p no podíamos contestar, porc¡uo cinco piezas que por lijeras habíamos podido llevar, se rompieron todas. Sin embargo nuestro batallou atacó con entusiasmo y tomó <los piezas de artillería. (La una quehracl;.t la cureña y la otra hundida en un pant:mo por Jo que habian sido abandonadas.) Llc � .í ·.11 refuerzo de tres cañones que mandados por sus beneméritos oficiales, hicieron !ll mayor estrago so­ bre el enemigo que hacia una vigorosa defensa porque se veia encerrado y porque sabe que no se encuentra cuartel, porqu e asi se lo han hecho creer sus jefos. ( No son sus jefes los autores d e esta creencia sino el mismo Garrara que, en oficio de ayer, les intima no clara cuartel a nadie.) La accion duró hasta despues de anochecer y se empezó a las doce del dia: el fuego fué vivísimo, el ejército se ha éubierto de gloria, siendo el resultado de sus fatigas la presa de cuatro cañones ( seis renglones mas aniba dice dos; ya se han vuelto cuatro ) 100 prisioneros, muchos pasa­ dos, cuyo número aun ignor.o y otro ciento mas que pasaron a cuchillo nuestros soldados. (Por mandato de su hermano D. Luis y consentimiento de su otro hermano D. Juan José fueron alevosamente asesinados por la noche esos miserables, únicos 100 prisioneros que habian tomado en los clias anteriores, disparsos por los ranchos y escoltando a los enfer­ mos y algunos bagajes; acc1on cruel y característica de cobardes y traidores que no fué sahitla del jeneral con disgusto.) lla tenido muchos muertos y muchísimos heridos.-El mucho trabajo que ofrece semejante accion - a la tropa, las pesadas marchas desde 'falca a este pueblo en cuatro dias a pesar de las lluvias y alguna escasez de víveres , me obli­ garon a trner desde el campo de batalla 'la mayor parte del ejército para ausiliarlos y disponerlos para seguir hoi en el alcance del resto de los prófugos piratas. Ya va a marchar y las guerrillas me avisan que el ens­ migo sigue su retirada tirando a brazos sus cañones porque ayer les qui­ tarnos cerca de 200 bueye� y todos sus bagajes (con el deseo) . Tambie n me dicen ahora que les quitaron dos banderas ( lo mismo que los bagajes.) Cuando tenga mas tiempo y ciertas noticias de todo daré a V. E. un parte mas circunstanciado. Baste por ahora decir que el ejército del gran Visir vá derrotado, que le seguimos con velocidad y que mui pronto seremos dueños de la Concepcion. En e,;tos c.lias anteriores ha hecho la van g uardia como 100 prisioneros ( los 1:1ismos r ¡ ue asesinaron esa noche) y quedan