Memoria histórica sobre la revolución de Chile : desde el cautiverio de Fernando VII, hasta 1814

»1·u nrnt11t1o!'f.J>ECHILE. 185 ' :nacion ;· citidRdano qae fué de los Estados Unidos, que eri este año se ba­ bia naturalizad°' en esta Ca¡ntal con granc\e aplauso del Gobier . no. y espe­ ranzai, de grandes servicios en beneficio de la independencia de Chile. Es­ . te estranjero (I Ue desde los principios de la tevqlucion sirvió.de · Misionero . de la.Libertad y <JUª tenia todos los caractéres tle espía de Napoleon, g oza.:. · ba un sumo aprecio y amistad con todos los mandones revolucionarios, 'Y les · tenia ofrecidos grandes auxilios de parte de su República, los q11e efecti­ vamente babia s::ilicitado pidiendo armas, artistas para varias fábricas y un surtido de imprenta q: ue es la que ahora llegó. El Congrei.o demuestra la complacencia que recabe en la introducci.:>n de este establecimiento,. y ·dá las gracias al mencionado Hevel con la contestacion siguiente : · 27 DE NOVIEMBRE, Noticioso el Congreso del arribo de la fragata Gallerva y &c. . En estosmismos días se descubrió una conspiracion coutra los· dominan\ett Carrer � s, a . quienes d . isponian asesinar por usu � arlores del G � bierno, segun d�1an ciertos oficiales de Granaderos ofendidos en la últuña mu­ danza del Gobierno del día 4 5. Fueron prendidos y encarcelados varios· stijews de representacion y entre ellos el ex-vocal y Comandante de Artl- ·- llería D. Juan Maquena,el Comandante D. Juan de Dios Vial, y el capitan ·o. F. Formas. A éste para tomarle declar.icion le condujeron a una pi�za '·aderezada lúgubremente, y colocando sobre una mesa un Santo Cristo con dos velas encendidas, le presentaron un Relijios·J, intimándole al misino · tiempo qoe tomase las 1lis ri siciones últimas de su vida; y que en esta con. sideracion declarase el dehto y cómplices de él. La sorpresa y el susto de . d � estos aparatos causar �n . en el reo tal trastorno, que cuasi produjeron el · mismo efecto que el supbc10 con que se le amenazaba, y costó mucho tra­ bajo paraponerlo en estado de· recibirle la declaracion. En esta descubrió muclios imp licados de los mas amigos de los Garreras, a quienes despues de asegurados y se g uidoles las respectivas sumarias, sufrieron unos la pri. -Yacion de sus empleos , otr ? s la p ona de destierro , pero a nadie se quitó la vida aunque poco faltó al dicho Formas para perderla de resultas del hecho referido. Por este. y otros acontecimientos empezaron a ser temidos yodia­ dos los Carreras y particularmente el Congreso no .se descuidaba en au­ mentar el partido de los descontentos; observando modo ele derribarlos, pues miraba en ellos la ruma y �estrucci.:>n de su p ode � y representacion. Gonstaba el Congreso de los Diputados de todo el Remo , y como en el tiempo en que estos hahian sido elejidos dominaban las facciones de Rosas . y Larraines, y en la Capi.tal la del Cabildo, sucedia que los miembros de áqO:el cuerpo eran ajenos de los nuevos Gobernantes·, y' corno tales entera­ mente sospechosos y desafectos. Nada ignoraban los Carrera,.¡, y quitán-· dose totalmente la máscara, aun de la poca condcseendencia 'J Ue hasta el presente le habían manifestado, determinaron la abolician del Congreso como en efecto la ejecutaron el día 2 de Diciembre. La subsistencia del hechoigualmenle qu e el· modo y todas las circunstancias fueron ignominio­ sas· y aterrantes. Se presentaro11 dicho día en la .Plaza mayor todas las