Gabriela Mistral: el libro y la lectura

45 Gabriela Mistral: El libro y la lectura la enfrenta una serie de fuertes críticas. En Quezada (2009), Mistral señala:“mientras viví en provincias me perdonaron la dirección del liceo; en Santiago, no. Jamás mi gremio profe- soril me perdonará mi falta de título. Sólo Aguirre Cerda es el único protector de mi carrera. Él sabe que hasta me habían hecho su amante, para justificar mi nombramiento. Ignora otras cosas iguales o peores, ¡Miseria de todas partes, y so- portables cuando hay grandes cosas que compensen de eso!” 34 . Dentro de las voces más hostiles hacia la carrera de Mistral y su falta de título profesional se encuentran, justamente, las de feministas como Amanda Labarca. En palabras de Diva Leopold:“Gabriela sufrió de muchos prejuicios, pero muchos. La aportillaron de una forma impresionante por ser directora y sin estudios formales. La Amanda Labarca fue una de sus peores enemigas en ese sentido. Por eso ella ya estaba cansada de esto y cuando la llaman de México se va sin pensarlo” 35 . En este mismo sentido, Ladrón de Guevara (1962) despliega el comentario realizado por Gabriela años más tarde: “hay una señora, doña Amanda, que se opondrá siempre a que me dén tal premio [Premio Nacional de Literatura] y como estoy ale- jada usará sus influencias políticas” 36 . El talento y experiencia de Gabriela Mistral se enfrentan así al profesionalismo ilustrado de otros y otras como Labarca. Es mirada en menos por su falta de estudios universitarios; por esto en palabras de Ladrón de Guevara (1999), Mistral expre- sa:“[los] latinoamericanos atribuyen al título un valor exage- 34 QUEZADA. Op. cit. p. 56. 35 Entrevista a Diva Leopold, Directora de la Biblioteca del Liceo Nº 7 Teresa Pratt y presidenta de la Fundación Gabriela Mistral. Realizada el 7 de diciembre de 2010 en la Biblioteca del Liceo. 36 LADRÓN DE GUEVARA, Matilde. Gabriela Mistral: Rebelde magnífica. Buenos Aires: Losada, 1962. p. 15.

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