Gabriela Mistral: el libro y la lectura

42 Gabriela Mistral: El libro y la lectura estandarte dentro de ellas. Sin embargo, esto estuvo lejos de ocurrir. Las organizaciones femeninas que se fundan en Chile después de 1915 son obras de señoritas y señoras bien educadas, y tie- nen como objetivo suscitar el interés de mujeres de clase me- dia y alta por la instrucción femenina, la igualdad ante la ley y la expresión propia. Amanda Labarca funda la primera de estas organizaciones, el Círculo de Lecturas; luego se gestan, entre otros, el Club de Señoras, al cual Labarca critica por dedicarse más a la vida social que a la discusión intelectual; el Consejo Nacional de Mujeres; el Centro de Formación Fe- menino de Estudios; y en 1931, la Unión Femenina de Chile. Según Lavrin:“la Unión Femenina de Chile pretendió ser una agrupación abierta que atrajera a las mujeres de clase media y media alta. Durante todo el año 1932, su revista, Nosotras , publicó artículos sobre obreros y obreras, sobre la crisis eco- nómica y social chilena. Entre sus colaboradoras se contaron Amanda Labarca [y] Gabriela Mistral, quien enviaba artículos de cuando en cuando” 26 . Gabriela Mistral participa en movimientos feministas chile- nos, mas nunca activamente. En su recado de 1928, “El voto femenino” 27 , Mistral manifiesta (Cid, 1990): “yo no creo sin embargo haber apoyado a mi leyenda feminista. No he escrito nunca elogio de este partido aún cuando dentro de él quiero y estimo a muchas dirigentes” 28 . Si bien apoya sus luchas, como el derecho a voto por parte de la mujer o el derecho a condiciones laborales justas e igualitarias para ambos sexos; diverge en el lenguaje y los contenidos utilizados por el femi- 26 Ibid. p. 376. 27 Este recado, que defiende el voto de las mujeres, fue escrito veintiún años antes que se considerara legalmente este mismo derecho. 28 MISTRAL, Gabriela. El voto femenino. En: Cid, Hugo Marcos. El recado social en Gabriela Mistral. Santiago: Primicias, 1990. p. 27.

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=