EL DESAFÍO DEL FUTURO. LA VISiÓN DE UN PASTOR
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cial de la Iglesia, partidos políticos de inspiración cristiana. Esto se acompa–
ñaría de una mayor toma de conciencia de la
originalidad de la fe
y de la
identidad de la Iglesia.
El
pensamiento marxista
da señales de
agotamiento
y de
dispersión:
aposta–
sía y heterodoxia fuera de los países socialistas, indiferencia dentro de ellos.
El
pensamiento liberal
ha tenido un repunte en las escuelas económicas del
Mundo Atlántico, en relación con la crisis del socialismo. No parece tener
soluciones a nivel planetario, en que una buena distribución y un ahorro de
los recursos naturales parecen ser más urgentes que un crecimiento, a
menudo desigual y despilfarrador.
Se observa, en general, una desconfianza creciente hacia las
ideologías,
en
cuanto estorban la búsqueda de la verdad y vuelven conflictiva la acción para
cambiar la realidad.
Hay, a la vez, admiración y temor de los progresos de la
ciencia
y de la
técnica:
programas espaciales, física nuclear, electrónica, cibernética, pro–
greso de la comunicación y el transporte, genética... maravillan e inquietan.
Se tiene la impresión de que falta una
sabiduría,
un principio orientador de la
actividad científica y técnica, puesta al servicio de la verdad y del hombre.
La
filosofía
se vuelve analítica; tiende a reducirse a una lógica, casi a uI)a
lingüística. La metafísica está abandonada. Se advierte la ausencia de un
pensamiento filosófico orientador, tanto en el orden de la reflexión como en
el de la acción.
Se advierte también una crisis en la
teología.
Se le siente a veces reducida a
un campo de estudio para intelectuales aun de poca fe, o utilizada para una
justificación de la acción política de sectores cristianos.
Se ha perdido el respeto a la
vida
humana y a la
integridad
física y síquica del
ser humano: anticonceptivos, esterilización, aborto, eutanasia, tortura, ge–
nocidio...
El
permisivismo
moral se manifiesta especialmente en la codicia de dinero,
de erotismo, la droga.
Hay una aspiración a una nueva
calidad de vida,
que dé cabida al juego, a la
poesía, a la fiesta, a la celebración, a la creatividad, que se relaciona con el
retomo al artesanado o a nuevas formas de trabajo más integradas y más
creativas, las tecnologías intermedias, la aspiración a la pobreza "evangéli–
ca", los proyectos de desarrollo "desde dentro" y "desde abajo", la supera–
ción de las ideologías y la elaboración de utopías.