Gorbachov: demoledor y constructor

situación de Gorbachov. Sin embargo, el pronunciamiento conservador sin el apoyo de Gorbachov yhasta basado en su eventual destitución, le permitió a los reformistas actuar como defensores de la Constitución y del Presidente legalmente elegido (aunque ellos mismos unos meses antes exigían su renuncia). Los golpistas subestimaron dos factores de suma importancia. Pri~ mero, organizaron su pronunciamiento como un "Golpe de palacio" (a imagen y semejanza de las destituciones de Beria yKhruschov); no se dieron cuenta que ahora en la Unión Soviética existía una sociedad civil que también pretendía decir su palabra. Los tanques llevados a Moscú como un factor de demostración de fuerza y amedrentamieto a las instancias estatales reformistas se encontraron inesperada– mente, con un fuerte movimiento de resistencia cívica, lo que privó a las Fuerzas Armadas, basadas en la Doctrina de la Defensa del enemigo externo, de todo espíritu de combate y capacidad de acción. Segundo, a lo largo de los años 1990-1991 la reforma económica, aunque lentamente iba avanzando, pudiendo la Nomenklatura del nivel medio, tanto en Moscú como en provincias, sentir el gusto de la propiedad y de la actividad empresarial propia. En el período previo a agosto de 1991, estos sectores, privatizando paulatinamente los bienes estatales a su favor, no rompían formalmente con las estructuras antiguas del poder al actuar en el espacio que éstas ofrecían. En los días del Golpe, ante una eventual vuelta al pasado, optaron por apoyar a Yeltsin. Estos dos hechos: la resistencia cívica al Golpe y la negociación con "el segundo escalón" de la Nomenklatura determinaron el triunfo de Yeltsin en aquellos días. El Golpe fue aplastado. Gorbachov regresó a Moscú. Sin embargo, la situación polítia en el país había cambiado rotundamente. Uno de los bandos en pugna perdió, mientras que el otro accedió a la plenitud del poder. En estas condi– ciones el bando ganador ya no necesitaba de un centro mediador; por lo tanto, el nuevo cuadro político no le dejaba espacio al Presidente de la Unión Soviética. El fracaso de los golpistas entregó el poder completo, y sin el contrapeso de una oposición, a los reformistas. El cambio en el carácter del poder en Rusia después del fracado del Golpe de Agosto, por su significado equivale a una revolución o a un Golpe de Estado exitoso. Termina el período del desarrollo evolutivo de las reformas en la Unión Soviética. Comienza el período del desarrollo rupturista.l\1ientras tanto, frente a este cambio del carácter del poder en Moscú, los líderes de las repúb1icas soviéticas se ven liberados de la presión unificadora del centro. Más aún, presintiendo que el nuevo gobierno ruso va a ser un gobierno fuerte: pretenden asegurar sus espacios de poder. -27-

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=