Integración de Chile al Mercosur: escenarios y perspectivas

Desde 1990 hasta 1997, la inversión extranjera directa ha crecido a una tasa acumulativa anual de 27,6%. Los aportes de capital del E. 1. E. lo han hecho al 39,3%, en tanto que los créditos han sido más moderados en su incremento, alcanzando una expansión del 8,4% promedio anual. Durante 1998, en plena crisis asiática, la inversión directa, para el período enero-octubre, ha mostrado un significativo crecimiento del 6,2% con relación al mismo período de 1997 y, si bien éste se presenta más moderado en su incremento que la media de los años anteriores, es una demostración de que, hasta ahora, los efectos de la crisis asiática no se han visto reflejados en la inversión directa que fluye hacia Chile. Las ventajas comparativas que Chile posee en algunos sectores como la Minería, la Silvicultura e industrias de la madera, la Agricultura y sus industrias relacionadas, han orientado el ingreso de capitales preferentemente hacia esas áreas de la economía, incidiendo, sin duda, en los servicios que se vinculan también al desarrollo de esas actividades. Desde 1974 y hasta septiembre de 1998, más del 42,7% de la inversión materializada a través del Estatuto de Inversión Extranjera se ha canalizado hacia el sector minero nacional, porcentaje que se ha configurado, principalmente, por la inversión ingresada en el período 1990 - junio 1998. Este sector capta un 12% del gasto mundial en exploración y se estima que hacia el año 2000 Chile abastecerá el 40% de la demanda mundial de cobre y un porcentaje significativo de la de otros minerales como litio, yodo, plata, oro y molibdeno, entre otros. Los sectores que siguen en importancia son Servicios, con un 24,0% e Industria, con 15,5%. En el período 1990 - junio 1998, estos dos sectores parecen haber redistribuido su participación, haciendo que Servicios supere a Industria en poco menos del doble, con respecto a la media histórica. Dos sectores que se destacan por su incidencia en el incremento de la inversión extranjera, particularmente en los últimos años, son el de Electricidad, gas yagua, que se ha materializado en su totalidad en la década del '90 y el de Transporte y Comunicaciones, en el cual el 82% de la inversión se ha concretado en este mismo período. Ambos sectores se han visto favorecidos por los planes de privatizaciones y licitaciones de puertos, caminos y carreteras. El mayor incremento de la inversión extranjera en Chile en los últimos años se atribuye, principalmente, a la estabilidad política y a una economía sana, agregado a ello la preocupación de las autoridades monetarias por mantener tasas de crecimiento razonables en el tiempo. Sin duda, éstos son factores de importancia para el inversionista. Por otra parte, los procedimientos vinculados a la inversión extranjera juegan un rol fundamental, ya que en la medida que éstos sean claros, simples y no discrecionales, le otorgan credibilidad al sistema y una imagen de confiabilidad al país. La inversión chilena en el exterior Un notorio auge ha experimentado desde 1990 la inversión de capitales chilenos en el exterior, en virtud de la flexibilización de las regulaciones que generara un fuerte impulso a la actividad de inversionistas chilenos a partir de dicho año, así como de la creciente inserción internacional experimentada por la economía chilena. La exportación de capitales nacionales suma ya casi ocho años, acompañando al reconocido dinamismo que muestran el Comercio Exterior y la Inversión Extranjera en el contexto económico nacional. 43

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