Enfrentando los cambios globales: anuario de políticas exteriores latinoamericanas: 1991-1992

HONDURAS: A LA BUSQUEDA DE NUEVOS ESPACIOS 205 situación llegó a su punto culminante cuando, en julio, el embajador Arcos exigió públicamenteel castigo de los responsables por la violación y asesinato de una colegiala. Los principales sospechosos de este abominable crimen son un coronel y un capitán, a quienes sus compañeros de armas han intentado proteger, entorpeciendo las investigaciones judiciales y violentando la jerar– quía que debe primar a favor de los tribunales civiles. La intervención del embajador norteamericano constituyó un fuerte espaldarazo a favor de la justicia civil y permi tió que los dos oficiales fueran llevados a prisión, donde esperan la sentencia. . d) Asistencia económica y técnica para facilitar la lucha contra el narco– tráfico. En marzo trascendió a los medios de comunicación el texto completo de un informe elaborado por la DEA sobre el tráfico de drogas a través del territorio hondureño. De acuerdo a ese documento, "Honduras continúa siendo un lugar de transbordo para la cocaína embarcada hacia los Estados Unidos, yen menor grado hacia Europa, procedente de Colombia" 4. Durante 1991 ambos gobiernos firmaron acuerdos de cooperación y, en octubre, se inauguró un potente radar en la costa norte del país, que forma parte de la red de radares del Caribe encargados de controlar el movimiento aéreo en la zona y evitar el tráfico de drogas. La colaboración entre los dos países en la lucha antinarcóticos parece ser una de las áreas menos conflictivas de las relaciones bilaterales. Aunque se resisten a convertirse en una fuerza especial dedicada a combatir el narcotrá– fico, los militares hondureños han intensificado sus labores de vigilancia y control, lo que ha dado como resultado que apenas en diez meses hayan sido interceptados más de 450 kilos de cocaína, la mayor cantidad de cocaína capturada en Honduras en tan poco tiempo. Aún así, las presiones nortea– mericanas para involucrar más profundamente a los militares hondureños en la lucha contra el tráfico internacional de drogas, semantienen y acentúan. Pero, a pesar de las dificultades y controversias surgidas en el diseño y reacomodo de la nueva estrategia norteamericana para la región. Estados Unidos sigue siendo el principal aliado y soporte económico y militar de Honduras. No es casual que a lo largo de 1991 el presidente Callejas haya viajado en ocho oportunidades a Estados Unidos, entre visitas privadas y oficiales. Como demostración de confianza en el actual gobierno hondureño y reconocimiento a los esfuerzos del equipo callejista por aplicar el PAE, Was– hington decidió, a fines de septiembre, condonar la mayor parte del monto que Honduras le adeuda, unos 434 millones de dólares, cifra que equivale al 92 % de la deuda que tiene con Estados Unidos y al 15 % de toda la deuda externa hondureña. La condonación ha sido interpretada como un importan- 4 Boletin del Centro de Documentaci6n de Honduras, N. 119, marzo, 1991.

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