Desarrollo de la Antártica
EL DESARROLLO DE LA ANTÁRTICA valiosa desde un punto de vista personal, profesional y desde el pun– to de vista de la afirmación nacional en esta parte del mundo. En lo particular, las respuestas aprecian especialmente la compensación económica importante que estimula la decisión de participar e'1 las actividades antárticas durante un año. El análisis :preliminar de la información reunida, y que esperamos completar e interpretar mejor en un futuro próximo, nos permite destacar la siguiente situación: El problema que está en la base de la experiencia antártica es el del aislamiento y de la convivencia forzada en una microsO'ciedad incompleta, cerrada, heterogénea en su composición social, pero no– tablemente homogénea en sus roles y funciones durante la larga invernación antártica. La situación se encara y se resuelve más O menos satisfactoriamente a través de un intenso programa de acti– vidades, una incesante rotación en los roles de trabajo (salvo en las tareas especializadas de la investigación científica), una adecuada uti– lización del ocio o del tiempo libre (lecturas, juegos de salón, cursO& de idiomas grabados en disco, excursiones o paseos durante los pe– ríodO's de buen tiempo, etc.), y, sobre todo, mediante contactos o comunicaciones radiales con sus familias, de media hora de duración y hasta dos veces por semana. - Los problemas de inadaptación psicológica seria, vale decir, de rup– turas del equilibrio de la personalidad por influjo del medio, o lo que en la experiencia polar de otros países, se conoce como "sÍndro– me de invernación", es muy raro en las bases ohilenas. Lo usual son las neurosis y los estados depresivos transitorios, que son enfren– tados í con el consejo de los jefes de las bases, con la ayuda del en– fermero, la terapia de ¡grupo y, en casos especiales, con indicaciones médicas desde el continente, puesto que las bases no poseen ni mé– dicos ni psicólogos. Estas situaciones se compensan en las bases chi– lenas con la vigencia de un ambiente de jovialidad y de broma que ha llamado la atención de los psicólogos en la medida que puede atentar también contra la privaddad de sentimientos y contra la convivencia normal. En el Centro Meteorológico Presidente Frei, existe un hreve recorrido llamado "avenida de las tera:pias", que re· fleja un poco el espíritu con que se enfrentan los casos en una si– tuación psicológica relativamente "benigna". En la opinión general, se puede afirmar que el "síndrome de invernación" (entendida como las perturbaciones individuales y colectivas que afectan las relaciones sociales, profesionales y jerárquicas del grupo de trabajo debido a la aJgresión del específico modo de vida antártico), no se configura ti-
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