Desarrollo de la Antártica
EL DESARROLLO DE LA ANTÁRTICA ra algunas especies de Pinnipedios y aves, disminuyendo para éstos la capacidad de soporte ambiental. Si aceptamos un modelo logista de crecimiento poblacional, la conclusión es obvia, sólo puede es– perarse un descenso de las poblaciones predadoras (vg., focas y aves) . Ciertamente, por razones de predación selectiva de tamaño y ne– cesidades energéticas, los invertebrados quedan fuera del espectro trófico de los Pinnipedios, no así para las aves buceadoras, pero hay que tener en cuenta que los actuales patrones de alimentación son consecuencia de largo tiempo de selección natural· (Elton, 1927), Y no puede esperarse cambios bruscos en la alimentación de las espe– cies por efecto de la manipulación del hombre sobre las comunida– des. De tal manera que podemos pensar razonablemente que la man– tención de los ,peces en las comunidades costeras es requisito para mantener las poblaciones de focas. Laméntablemente, pocos estudios sobre las dietas de las focas se han llevado a cabo, y menos sobre sus requerimientos energéticos, lo que atenta para las futuras medidas de .conservación y uso del medio costero antártico. ,Por otro lado, ¿qué cambios OCUlrirían con los organismos que consumen los peces? Lógicamente, de acuerdo con ,la teoría, debería. mos esperar un aumento de sus tamaños po:blacionales. Sin embargo, como poco sabemos de su biología, sus hábitos alimentarios, tasas de crecimiento, disponibilidad de alimento, etc., resulta muy difícil realizar predicciones en este sentido, puesto que pueden, en ausencia de un predador, producirse interacciones competitivas que disminuyen notablemente la diversidad y características de las comunidades que conforman. En suma, a nuestro juicio, sólo es posible pensar en que un au– mento de las actividades humanas, como compatible con la manten– ción de las características del ambiente costero de la Antártica, si disponemos de los conocimientos necesarios sobre la organización de las comunidades naturales en estos lugares. Que permitan la toma de decisiones sobre qué organismos y qué cantidad pueden obtenerse, cambiando el viejo concepto de explotación por uno de "manejo". Porque, sin duda, la explotación indiscriminada de recursos natu– rales renovables puede afectar más a las comunidades y, eventualmen· te, al ecosistema, que algunos tipos de contaminación. !Puesto que actualmente existe la tecnología que puede sup·erar este problema Sólo faltan la decisión política y la inversión monetaria que ella re– quiere. Sin embargo, la necesidad de estudio en las comunidades naturales
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