Desarrollo de la Antártica

J;;L DrcSARROLLO DE LA ANT. .\RTlCA proyectos e industrias pesqueras, sin más riesgo que los propios a una actividad empresarial-industrial. Sin embargo, estos principios de– ben conciliarse con las contingencias que ,pueden afectar las opera– ciones de pesca en la zona antártica. Con este criterio, es posible desarrollar proyectos que aseguren el éxito de las actividades pesqueras basadas en el recurso krill; no obs– 'tante, es conveniente un análisis detallado de los siguientes aspectos principales: a) Cálculo de la localización óptima del puerto base y de las plan– tas industriales, en equilibriO' con los factores ligados a la abun– dancia y distribución del recurso natural y a la cuantía y áreas de los mercados por satisfacer; b) Sensibilidad de los parámetros que definen la productividad em– presarial, principalmente la incidencia y variabilidad de los cosl'GS operacionales de captura y costos unitarios de la materia prima. Es importante destacar que los costos de industrialización están en función directa con los costos unitarios ele la materia prima y con la estacionalidad de las capturas; c) Usos alternativos de los medios de producción, para utilizar la flota en otras pesquerías suraustrales y la diversificación indus– trial, que permita aprovechar varias especies como materia primé'.; d) Incidencia de aspectos jurídicos, naciO'nales e internacionales, en la explotación comercial del recurso krill antártico. El interés de esta pesquería, por parte de varios Estados, exigirá a mediano plazo de decisiones nacionales y de la cooperación inter– nacional para adoptar posibles medidas de administración pesquera y de conservación del medio ambiente. 5. LíNEAS DE ACCIÓN Finalmente, de acuerdo con los elementos analizados y consecuentes con la realidad nacional, sectorial y empresarial, es posible demostrar que la explotación del krill es factible, y es oportuno establecer al· gunos delineamientos para impulsar el desarrollo de esta pesquería. Estas lineas de acción pueden estudiarse con plena propiedad, porque existe el nivel de conO'cimientos sufícientes y la capacidad ingenieril para captar, adoptar y producir la tecnología necesaria para el apro– vechamiento integral de los recursos pesqueros tradicionales y no tra– dicionales. El reflejo de esta realidad se puede reafirmar al indicar las bases que sustentan estos planteamientos: