Desarrollo de la Antártica

Juan C. Castilla I LA INVESTIGACIÓN CIF.NTIFICA EN LA ANTÁRTICA científicos fueron desoídos o mal utilizados duran:te la primera mi– tad de este siglo y la lucrativa actividad ballenera desapareció, des– de luego, junto a las ballenas. Esas experiencias no pueden repe– tirse con el problema de la pesquería del Krill, aunque las circuns– tancias y el recurso sean diametralmente distintos. Existen preguntas ecológicas importantes que deben responderse respecto a este crustá– ceo. La tecnología y la investigación científica deben ir apareadas respecto de este recurso antártico. Recientemente se ha lanzado la idea de sembrar los Canales dcJ Sur de Chile con salmones (1oyner, fMahnken y Clar,k, 1974) con la posibilidad de migraciones de estos peces hacia la Antártica y utili. zación del Krill como recurso alimentario. La idea es un gran desa– fío [pero plantea un sinnúmero de interrogantes ecológicas que de, berán ser despejadas antes de ponerlas en práctica; estas interrogan. tes se refieren tanto a la situación en los canales del Sur de Chile, como en lo relacionado a la Antártica. De perseverarse en la idea puede -al igual que el Krill antárti– co- transformarse también en una de las grandes temáticas bioló. gicas antárticas del futuro. Otra actividad de Investigación Antártica que es posible de usar en este capítulo, se refiere a la situación de las Ciencias Geológicas. A nivel global son claros los avances y el asentamiento de las gran– des teorí:as geomorfológicas y se deriva continental ,respecto a la Antártica (Craddock, 1969; Schopf, 1969; Frakes y Crowell, 1969; Hayes y Pitman, 1969). Incluso a nivel chileno es posible observar -ahora más localmente a través de las publicaciones nacionales- etapas primarias descrip· tivas que ya han sido sobrepasadas, si no totalmente, al menos en forma parcial. Vieira (1976) entrega !Un sumario sobre el aporte chi– leno al conocimiento geológico del Continente Antártico en los úl· timos años. Esta visión centrada en los aportes nacionales ofrece claros peldaños ya avanzados. Habiéndose mperado algunas accio· nes básicas de mapeo y descripción se comienza a elaborar un IPro· grama de Geología Económica. Las investigaciones científicas y tec– nológicas en este campo presentan amplias posibilidades. La exploración antártica respecto a recursos energéticos es otro de los capítulos apasionantes del futuro desarrollo antártico. Los principales vados que se observan en estos campos (que no se refie– ren al "Territorio" propiamente tal), no son necesariamente cien– tíficos ni tecnológicos, sino que de orden legal a nivel internacional. 139