Desarrollo de la Antártica

INTRODUCCION Francisco. OrTego Vicuña Durante años el continente antártico fue considerado como un lu– gar remoto y virtualmente inaccesible, abierto únicamente al esfor– zado trabajo de los científicos y a la presencia de bases de algunas na– ciones visionarias. Sin embargo, esta perspectiva ha cambiado dramá– ticamente en los años recientes y ya se mira a la Antártica como una nueva frontera susceptible de conquista y aproveohamiento por el hombre. El desarrolla de la Antártica ya ha comenzado en forma inequívo– ca. El Iprogreso vertiginoso de la investigación científica y de los me– dios tecnológicos ha llevado a un conocimiento más profundo de ese continente, el cual, si bien todavía es insuficiente, permite ya apre– ciar a cabalidad el potencial de utilización de la región. Consiguien– temente, muchas son las naciones que hoy miran hacia ese potenciaL Además del potencial de explotación de recursos minerales e hi– drocarburos, que si bien todavía es incierto no por ello deja de abrir perspectivas de enorme interés. la Antártica proporciona una signi– ficativa riqueza en el plano de los recursos vivos, particularmente en lo que se refiere a la pesca y a los mamíferos marinos. En este cam– po es donde se observan las mayores evidencias de un rápido desa– rrollo. Por otra parte, el aprovechamiento de recursos !hídricos, el incre– mento y ;perfeccionamiento del transporte naval y aéreo, el interés turístico y otros factores constituyen también aspectos del desarrollo antártico que ya se encuentran presentes y en rápida evolución. IEI creciente desarrollo de la Antártica plantea complejos problemas en el ámbito científico y tecnológico y en el ámbito de la cooperación internacional. Desde luego, la frágil ecología de las ¡zonas de hielo involucra el serio riesgo de que cualquier forma de explotación. que no cuente con controles y resguardos muy firmes, pueda provocar un deteriora ambiental de imprevisibles consecuencias, no sólo para el continente antártico, sino para muchos países, como Chile, cuyo sis– tema ecológico está directamente vinculado a ese continente, sin per– juicio de las consecuencias que se podrían hacer sentir en todos los continentes. En el ámbito de la cooperación internacional surgen retos igual- 11