Las relaciones entre los países de América Latina
Alberto Sepúlveda A. / LA DINÁMICA DEL EQUILIBRIO PE POPER EN SUDAMÉRICA ... ser tomado en consideración para diseñar políticas para el futuro. Cabe considerar, además, que el "manchón indio" divide a Ecuador y Perú entre la costa occidentalizada y las regiones de la selva amazónica ricas en petróleo. En lo que se refiere a los otros países de Sudamérica hay que distinguir la evolución seguida por las antiguas posesiones portuguesas y lo acae– cido en la región dominada por los españoles. Brasil tuvo la ventaja que su Independencia de Portugal fue pacífica y conservó la estructura admi– nistrativa del pasado lo cual le permitió mantener su unidad territo– rial 14 e incluso ampliar sus posesiones a costa de los herederos del Imperio Español, que estaban sumidos en la anarquía. Recordemos cómo fue el proceso de Independencia La invasión de Napoh::ón a la Península Ibérica implicó que la. Casa Real de Portugal huyera a Brasil y que desde Río de Janeiro gobernara el Im– perio. Derrotado Napoleón, el rey volvió a Lisboa y dejó como regente de Brasil a su hijo. La Independencia consistió en que el hijo se negó a aban– donar Brasil cuando su padre lo llamó y se convirtió en el gobernante de un país independiente. La Casa de Braganza rigió los destinos de Brasil hasta 1889. En estas condiciones mantuvo la unidad nacional y no se produjo la ruptura violenta con el pasado que caracterizó a los hispano– americanos, lo cual ahorró al Brasil la violenta anarquía que se vivió en el resto de América Latina. Las instituciones de la colonia subsistieron y se reforzó una clase diri– gente que pudo aprovechar la confusión nacional hispanoamericana para expandir el territorio de Brasil. Por ello Brasil es posiblemente el país de Sudamérica que tiene mayor claridad en sus objetivos nacionales y cuenta con una excelente diplomacia profesional que le permite operar con una eficiencia muy superior a la improvisación hispanoameri– canal!>. Brasil pudo llevar a cabo una política exterior basada en con– cepciones de poder. La debilidad nacional brasileña arranca, paradojalmente, de la larga vigencia del Imperio. La esclavitud, que desapareció rápidamente en Hispanoamérica, subsistió hasta 1888 en Brasil. El grado de inte– gración del africano a la estructura de poder es muy inferior en el Brasil que en los países hispanoamericanos pese a que la influencia cultural del africano es muy superior, como lo demuestra la existencia de fenó- H Ver Nelson, de Souza Sampaio: "O processo da Independencia do Brasil"; Revista Brasileira de Estudos Políticos. N° 30,Janeiro de 1971, pp. 38-80. 15 Ver, por ejemplo, Luis A. P. Souto Maior "Polltica Externa do Brasil" en Revista Brasileira de Estudos Políticos. N° 42, Janeiro de 1976, pp. 175-196. Ver también Jorge de Carvalho e Silva: "O Brasil en frente a os grandes problemas políticos contemporaneos" en Revista Brasileira de Estudos Políticos. N° 32, Julho de 1971, PRo ~n I 75
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