Las relaciones entre los países de América Latina

Alberto Sepúlveda A. / LA DINÁMICA DEL EQUILIBRIO DE PODER EN SUDAMÉRICA •.. ba Kahn:.! para el año 2.000. La realidad latinoamericana es tan cam– biante, tan tumultuosa, que hace difícil la posibilidad de proyecciones a un plazo mediano. Los problemas que acarrea el desarrollo y el proceso de integración nacional son de tal magnitud que generan consecuencias serias en los sistemas políticos y en las relaciones internacionales de los estados. Las fuertes tensiones que origina la modernización rompen, con frecuencia, la normalidad constitucional y por ello la repetición, ya rutinaria, de ciclos de autoritarismo, gobierno constitucional, caos o anarquía y de nuevo' la fórmula autoritaria. Estos. ciclos se han venido repitiendo en toda América Latinay lo único que ha variado ha sido la duración de cada ciclo en los diversos países. En algunos, como en Bolivia, los tres ciclos se repiten con demasiada rapidez impidiendo la estabilidad. En otros. como en México, el ciclo anárquico dominó gran parte del siglo pasado y los primeros años de este siglo; el ciclo autoritario dominó a fines del siglo pasado y a contar de la década del 30 lo viene haciendo en este siglo. Cada cambio de ciclo acarrea alteraciones en la política de desarrollo y en las alianzas o amistades internacionales. En muchos casos, una ten– sión interna se trata de aminorar mediante la creación de una crisis inter– nacional y, a veces, se ha llegado a la guerra. Como hasta el momento ha sido imposible predecir cada ciclo se hace sumamente difícil hacer proyecciones sobre el futuro de los países latinoamericanos. El crecimiento económico, por ejemplo, requiere de una cierta permanencia de las estrategias de desarrollo, en otras pala– bras, de estabilidad política. Por ello que el ciclo autoritario, en general coincide con una etapa de crecimiento económico. Sin embargo, al cabo de un tiempo las tensiones sociales son de tal magnitud que el régimen autoritario es abandonado por una experiencia de gobierno constitucio– nal. En muchos casos las tensiones llevan a una anarquía política, en otros, a una duración mayor del régimen civil constitucional. La mayor preocupación por los problemas sociales lleva a la adopción de políticas de bienestar y a una cierta disminución de las inversiones meramente productivas. En otras palabras, una política de "crecimiento rápido" implica una despreocupación por los gastos sociales ya que son "im– productivos" y este tipo de estrategia de desarrollo supone, en gran medida, un gobierno autoritario, civil o militar, ya que debe hacer caso omiso de las peticiones de los grupos más pobres. Al cabo de un tiempo la insatisfacción que provoca esta política en los sectores perjudicados provoca la rebelión y el establecimiento de un régimen con mayor preo– pación por la redistribución de la riqueza. Como consecuencía, el creci– miento económico se aminora y muchas veces la pugna de los diversos sectores sociales por una participación mayor conduce a la inflación, a ~ Ver Murilo Melo Filho: El desafío brasileño Ed. Pomaire, Buenos Aires, 1972, pp. 17-28.