América Latina: ¿clase media de las naciones?

posición casi antagónica al Fondo Común propuesto, por considerar que perderían su influencia actual en los mercados internacionales respectivos sin obtener una contraprestación adecuada. Con estas po– siciones algunos países latinoamericanos se han ganado la desconfianza de otros países en desarrollo. ¿No sería más razonable emplear la ca– pacidad de anállisis que existe en América Latina para buscar solu– ciones concretas a estos problemas específicos, haciendo más viables las propuestas de la UNCTAD, que presentar posiciones abiertamente negativas? 14 De otra parte, ¿no sería conveniente que América Latina propu– siera fórmulas concretas para lograr un procesamiento mayor de pro. ductos básicos en el Tercer Mundo y para defender la competitividad de los productos naturales frente a los sintéticos, que constituyen objetivos en la enunciación del PIPB con respecto a los cuales no se presentan conflictos de interés entre Jos países en desarrollo? Ante la relativa pasividad latinoamericana, la discusión se ha concentrado casi exclusivamente en el Fondo Común y no se ha avanzado en resol. ver los problemas que la propuesta actual presenta. B. Negociaciones Comerciales en el GATI La posición del Tercer Mundo en las negociaciones de la llamada "Ronda Tokio" en el GATI se ha visto debilitada por un conflicto real de intereses, si bien éste no siempre se ha hecho explícito. Como lo han mostrado varios estudios, a 110s países más pobres les conviene mantener los márgenes de preferencia otorgados por los Sistemas Ge– nerales de Preferencia y la Convención de Lomé. En cambio a los países más avanzados del Tercer Mundo, y en particular 'a América Latina en su conjunto, les conviene más la desgravación general y permanente de las tarifas NMF (de la cláusula' de Naciones Más Fa– vorecida), así se erosionen algunos márgenes de preferencia. 15 De haberse afrontado este conflicto, seguramente se habrian en– contrado fórmulas de acuerdo que hubieran permitido a los países del 14 Este caso recuerda la posición de Colombia frente al Fondo Común de Reservas Andinas, propuesto por la Junta del Acuerdo de Cartagena. Colombia inicialmente obstaculizó el acuerdo por considerar que estaría congelando sus reservas con el peligro de que Perú y Chile, en grave situación deficitaria, rápidamente agotaran las disponibilidades del Fon– do. Cuando decidió negociar, se encontraron fórmulas para sortear esta eventualidad y se ligó el acceso al Fondo con el compromiso de no apli~ car salvaguardias al comercio interregional, lo cual obviamente benefi– ciaba al proceso de integración y a Colombia en particular. 15 Véase Cline, W., Multilateral effects of tariff negotiations in the Tokio Round, Brookings Institution, 1978. 114 IBRF, Trade liberalization and export promotion, 1977. IBRF, Prospeets for developing countries, 1977.

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