América Latina y Asia-Pacífico

392 FELIPE LARHAIN to sostenido del 6% o más. El progreso en cuanto a aumentar las tasas de ahorro locales es crucial en este aspecto, dado que el ahorro externo sólo puede usarse moderadamente. Una re– forma institucional clave que se difunde por toda la región es la privatización de los fondos de pensiones. Hasta la fecha, la ex– periencia indica que esta reforma impulsa el ahorro interno, junto con proporcionar muchos otros beneficios. En suma, el siglo XXI presenta muchos desafíos para el futuro de América Latina. Sin embargo, las oportunidades en una economía globalizada, donde América Latina está cada vez más preparada para participar y competir, son enormes. Las re– formas que se han hecho, en su mayor parte, son irreversibles. Esto ha atraído a muchos inversionistas nuevamente hacia esta región, incluidos los mismos latinoamericanos que no hace mucho pensaban que era mejor invertir en el extranjero. Mu– chas de estas inversiones se han dirigido al sector transable y la región ha abrazado la meta del libre comercio. En primer lugar, dentro de las Américas, como sucede ahora. Y en diciembre de 1994, los jefes de Estado de todo el continente se comprometie– ron a que la zona de libre comercio de las Américas sería reali– dad en el año 2005. No obstante, esta no es una "fortaleza Amé– rica" que mira hacia adentro. América Latina busca nuevos so– cios fuera de su propio continente, y se empeña en profundizar su integración comercial y de inversiones a través del Pacífico.

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