América Latina y Asia-Pacífico
AMERICA LATINA Y LA ASOCIACION TRANSPACIFICA: ... 349 futuros funcionarios de gobierno, líderes empresariales e inte– lectuales. Por lo tanto, el seminario académico especial que Chile organizó inmediatamente antes de esta reunión es un paso im– portante, que debe ser fuertemente estimulado. Debemos con– siderar como ejemplo los aportes de PAFTAD (Pacific Trade and Development Conference), que incluye a varios países latinoa– mericanos. Durante casi tres décadas, PAFTAD ha hecho mucho por acercarnos como región, y sus redes ayudaron a formar PECC y APEe. Entre sus ex-alumnos se encuentran muchos mi– nistros y líderes empresariales, cuyos conocimientos de la re– gión son mejores, a causa de los tempranos contactos académi– cos en PAFTAD. PECC continúa esa tradición en forma más am– plia. Los Centros de Estudios de APEC también están dirigidos a fortalecer los vínculos académicos. No hay nada que sustituya la experiencia de primera fuen– te. Así, las instituciones académicas harían bien en iniciar más becas de visita entre intelectuales a través del Pacífico, lo cual produciría, probablemente, mayor financiamiento y becas para post-graduados. Se sabe que el efecto multiplicador que esto acarrearía es vasto. Lo que el gobierno puede facilitar Es estimulante ver que cada vez son más los gobiernos que inician visitas regulares de líderes y ministros a ambos lados del Pacífico. Con esto los gobiernos obtienen una comprensión cla– ra de los intereses nacionales comunes y dan una señal para que otros agentes económicos sigan el mismo camino. Por lo general, las delegaciones incluyen un contigente de represen– tantes empresariales. Aunque los gobiernos no deben hacer el trabajo pesado en lo que respecta a los negocios, dichas visitas sirven como una introducción útil para emprenderlos y prepa– ran el camino inicial para realizar negocios a alto nivel e iniciar contactos de gobierno.
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