América Latina y Asia-Pacífico

J42 TOMAS GONZALEZ SADA tenido un significativo crecimiento. En 1993, un año antes de la implementación del acuerdo, la comercialización total de bie– nes entre Estados Unidos, Canadá y México llegó a los 586 mil millones de dólares. En 1996, el total de las actividades comer– ciales había alcanzado los 844 mil millones de dólares, lo que constituyó un crecimiento de un 44%. Los cálculos estimados para este año reflejan una cifra record de actividad comercial que alcanza los 950 mil millones de dólares, lo que constituye un 11% más que lo alcanzado en 1996. Otra visión se logra al revisar el comercio internacional en términos del Producto Interno Bruto (PIB) de la región. En 1993, el comercio tocal anterior a NAFTA fue 7,8% del total del PIB de Estados Unidos, Canadá y México. En 1996, el intercambio total ele bienes llegó al 10,1% del PIB. Este año, se estima que el comercio internacional en la región de NAFTA alcanzará el 10,8% del PIB de la región. De igual manera, todos los miembros de NAFTA han au– mentado sus exportaciones en la región. Las exportaciones de Estados Unidos a Canadá y México han aumentado en un 34%, de 134 mil millones de dólares en 1993 a 179 mil millones en 1996. Este crecimiento de las exportaciones implicó un cambio del 2,0% al 2,4% en el PIB norteamericano. En 1996, las expor– taciones de Canadá a la región alcanzaron los 161 mil millones de dólares, lo que representa el 27,5% del PIB canadiense. Este volumen de exportaciones creció en un 40% en comparación con los 115 mil millones de dólares alcanzados en 1993, cuando las exportaciones representaron el 20,8% del PIB. México ha aumentado sus ventas a los socios de NAFTA de los 44 mil mi– llones de dólares que vendía antes del tralado a un total de 82 mil millones en 1996, 10 que refleja un crecimiento de un 86% en dólares nominales. Segün la cuota de participación en el PIB, la cifra aumentó en más del doble, de un 11% en 1993 a un 24,5% en 1996. Existe el consenso general de que estos resultados no se hubieran podido lograr sin una estructura de acuerdo adecua– da. Además, la participación de los sectores empresariales de