Brasil y Chile: una mirada hacia América Latina y sus perspectivas

BRASIL: LAS POLíTICAS PARA LA POBREZA Con la llegada del PT al gobierno federal, la pobreza y el hambre pasaron a ser cuestiones centrales de la agenda nacional. Los programas de transferencia mone– taria directa se convirtieron en sinónimo de política social. En su discurso inaugu– ral, el Presidente Lula prometió que al finalizar su gobierno todo brasileño podría comer al menos tres veces al día y que el hambre habría desaparecido del país. El programa Hambre Zero fue presentado como una acción innovadora de lucha con– tra la pobreza, que debería movilizar al gobierno y a la sociedad en una verdadera cruzada para eliminar el hambre 14 • El programa Hambre Zero era un conjunto de políticas, mal concebido e inadecuadamente orientado, que trataba de combinar políticas estructurales tales como la reforma agraria, con la creación de empleo; acciones focalizadas, como trans– ferencias monetarias directas destinadas a la compra de alimentos; la distribución directa de alimentos a poblaciones pobres y la creación de restaurantes populares a precios subsidiados; la lucha contra la desnutrición infantil; el apoyo a la agricultura familiar y la construcción de pozos y embalses de agua en las zonas de sequía, y otras iniciativas relacionadas con el tema. Pasaba totalmente por alto la experiencia con programas destinados a los pobres reunida por gobiernos anteriores. Pese a la intensa publicidad realizada por el gobierno y al apoyo de la opinión pública nacional y de los organismos internacionales, Hambre Zero fracasó y a fines del primer año del gobierno del Presidente Lula fue sustituido por el Beca Familia (Bolsa Familia) que reunió en un solo programa de transferencia monetaria directa los programas anteriores: Beca Escuela, Beca Alimentación, Tarjeta Ali– mentación (Hambre Zero), y Auxilio Gas l5 • En los dos años siguientes, el programa Beca Familia se ha ampliado significativamente y a fines de 2005 favoreció a ocho millones y medio de familias. De acuerdo con la retórica y la acción del gobierno, las políticas focal izadas de lucha contra la pobreza no forman parte de una estrategia más amplia de desarro– llo social. En especial, tras la reforma de la seguridad social, en 2004, la agenda política dejó de incluir propuestas de cambio más amplias del sistema de protección social. La Beca Familia representa la propuesta del Partido de los Trabajadores y de su gobierno para enfrentar la pobreza. Ni este ni los partidos de oposición parecen tener una agenda innovadora de desarrollo social. En breve, a lo largo de quince años, el sistema de protección brasileño pasó por muchas reformas 16 • Actualmente incluye un amplísimo sector de asistencia social y lucha contra la pobreza en el que se destacan los programas de Seguridad Social Rural (no contributiva), el Beneficio de Prestación Continuada y el Beca Familia. 14 En ese momento, especialistas, basados en investigaciones académicas habían concluido que, a raíz de la expansión de políticas universales tales como las de salud y educación, el hambre ya no era un problema nacional grave. La subnutrición estaba circunscrita a ciertas zonas, en su mayoría rurales, del noreste de Brasil (Monteiro, 2(03). 15 La Beca Familia tiene dos componentes: un valor fijo al que tiene derecho toda familia situa– da por debajo de la línea de pobreza y no sujeto a condicionalidades y un monto variable que depende de que los hijos permanezcan en la escuela. Sin embargo, el alcance del programa y la falta de mecanismos adecuados de monitoreo limitan la posibilidad de fiscalizar el cumpli– miento de los requisitos para obtenerla. 16 Para una visión amplia del tema, véase Draibe (2004) y Almeida (2004). 2.2.5

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