América Latina en el mundo: Anuario de Políticas Externas Latinoamericanas y del Caribe :1993-1996

67 los países del hemisferio y con Europa. Sin embargo, compelidos ya a modificar muchas de sus políticas económicas, sería ilógico afirmar que el gobierno de Cuba nunca estaría en el futuro dispuesto a modificar aspectos del sistema políti– co en aras de salvar algo de lo que se llamó en un momento «la Revolución». Ese es el gran tema en Cuba para el último lustro de este milenio.lEstará Fidel Castro dispuesto a cambiar las características fundamentales del sistema político cubano, que ha defendido tenaz y exitosamente por tanto tiempo, respondiendo a un marco de negociación nacional e internacional? lO resistirá tercamente, hasta desembocar en una contienda sangrienta nacional e internacional? NOTAS 1 Estos párrafos se basan en mi libro Jo make a world safe for revolution: Cuba's foreign policy, Harvard University Press, Cambridge, 1989. 2 Por supuesto, no todo salió bien. Cubanos en misión oficial fueron expulsados en diver– sos momentos de Ghana, Chile, Somalía, Kampuchea, Jamaica, Grenada y Suriname. J Cranma Weekly Review, 3 de febrero de 1991. 4 Por ejemplo, ver discusión en Dzhamal Mutaguirov, "El anticubanismo en la URSS», América Latina, N° 6, 1991, pp. 85-92. s Current Digest of the Soviet Press, 42, N° 9,4 de abril de 1990, p. 9. 6 Fax recibido por la Sección de Intereses de Cuba en Washington D.C., 11 de septiembre de 1991. 7 Santiago Pérez, "El fin de la URSS y Cuba», Cuadernos de Nuestra América, 10, N° 20, julio-diciembre de 1993, pp. 83-98. 8 Ver Edmé Domínguez Reyes, «La Unión Soviética y América Latina a finales de los ochenta», América Latina, N° 7, 1991, pp. 25-28. 9 Julio Carranza Valdés, "Cuba: los retos de la economía», Cuadernos de Nuestra América, 9, N° 19, julio-diciembre de 1992, pp. 134-136, 142. 10 Bohemia, 25 de octubre de 1991, p. 24. 11 Ángel Pérez Ruiz, «Saludos en la hora cero», Verde Olivo, N° 9, 1990, pp. 8-11.

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=