Nuestros vecinos

Roberto Arancibia Clavel 532 segundo en la zona E cordillerana y el Azul en Arica. Los ejércitos invasores Ama- rillo y Colorado convergerían sobre Tacna y los azules debían tratar de evitar a toda costa la conjunción de estas fuerzas adversarias. La crítica a cargo del Coman- dante de la división versó sobre el desempeño de las diferentes unidades destacando la resistencia de los jinetes y la excelente preparación del ganado. Observó la cerca- nía de las posiciones de artillería en relación a las unidades enemigas, guardando sus mejores elogios para la infantería, la mas sufrida en su accionar, la que según Cabrera habría marchado 500 kilómetros en el desierto inmisericorde, soportando a la vez el frío y el calor con todo el equipo a cuestas en sus espaldas. «Las grandes maniobras del año 20 en Tacna nos sirvieron a los conscriptos y reservistas para tomar conciencia de lo que debe el hombre soportar en una confrontación guerrera. Fuera de la sangre-que felizmente no fue derramada-comprobamos lo que eran el hambre y la sed acuciantes, la deprimente suciedad, enfrío nocturno que penetre en los huesos, el calor y la polvareda sofocantes, el cansancio atroz, todo lo cual suma- do alcanza al límite extremo de la resistencia física del ser humano.» 45 Perú y Bolivia reaccionaron prudentemente a las acciones chilenas y reiteraron la reinvindicación de sus derechos por la vía pacífica. El Ministro de los Estados Unidos en La Paz informaba que el Gobierno provisional de Bolivia parecía ansioso de evitar todo conflicto con Chile y aparentemente no había enviado tropas a la frontera. El Embajador en el Perú informaba a su vez de que no se habían moviliza- do las fuerzas peruanas. Chile sí, ha concentrado sus tropas en el norte, según se declara, solamente como precaución. Parece por lo tanto que no existe peligro in- mediato de un conflicto armado. 46 Es interesante conocer las opiniones del coman- dante de la primera división cuando fue interrogado al respecto en Diciembre de 1920. Cabrera sostiene que no se llegó a un enfrentamiento porque se»les heló» (sic) a Leguía y a Saavedra, Y la helada movió a Escalier (Jefe del Partido Republi- cano de Bolivia) a retractarse en Buenos Aires, a Saavedra a licenciar presurosamente sus contingentes y a Leguía a estarse quieto y a retirar de la región fronteriza algu- nas unidades de línea, para que no las viese el Embajador norteamericano que debía hacer un paseo por esos lugares. 47 Por su parte el Ministro de Guerra declaró ante la Cámara de Diputados el 09 de Diciembre de 1920 que las explicaciones que había dado el Gobierno de Bolivia desautorizaban las mas prestigiosas voces de los caudillos revolucionarios y proclamaban el respeto a los tratados que son la salvaguardia de nuestra tranquilidad. Todo esto vale poco decía Don Ladislao. Fue más allá nuestro éxito; con garantía de los hechos desapareció toda probabili- dad de una agresión armada; y así, mientras Bolivia licenciaba con anticipación el contingente que tenía en las filas del ejército, el Perú hacía desaparecer el suyo de las posiciones avanzadas. 48 Lo mismo repitió en otra forma con fecha 10 de Abril de 1922 ante el Senado.»le conoceréis por los frutos, dice el libro de la sabiduría, y hasta el mas miope puede dirigir sus miradas al despejado horizonte de nuestra 45 Ibidem. pp. 89-98 46 Jorge Gumucio Granier, Estados Unidos y el Mar Boliviano ,1997 en www.boliviaweb.co 47 Entrevista dada por el Coronel Luis Cabrera al Diario el Mercurio de Santiago el 21 de Diciembre de 1920, en la Llamada Movilización del 20, op.cit. pp.315-326 48 Sesión de la Cámara de Diputados del 09 de Diciembre de 1920.

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