Nuestros vecinos

El ayer y el mañana de la relación con Perú y Bolivia 423 El ayer y el mañana de la relación con Perú y Bolivia José Rodríguez Elizondo* Para los militares chilenos , la post Guerra del Pacífico fortaleció la estrategia de la disuasión clásica. Esa que Raymond Aron definió como «alternancia de ame- nazas encargadas de transmitir un mensaje y de mensajes preñados de amenazas». Obviamente, el mensaje consistía en hacer clara la voluntad de ejercer la fuerza, para conservar lo conquistado. La misión de los diplomáticos también fue ortodoxa: consolidar jurídicamente la soberanía sobre los nuevos territorios, asegurar a los vecinos que no habría «expansionismo» posterior y restablecer las redes políticas, económicas y cultura- les, que garantizan la coexistencia pacífica. A mayor éxito de la diplomacia –se suponía– menos necesidad habría de disuasión. Como siempre, la realidad fue más compleja que las teorías. Dado que los obje- tivos de Chile pasaban por «chilenizar» los territorios conquistados, mientras neu- tralizaba al Perú y Bolivia ante un eventual conflicto con Argentina, el proceso diplomático fue áspero, largo y sinuoso. Los compromisos de paz y reconocimien- to de los nuevos límites recién se cerraron en 1929 con el Tratado de Lima, medio siglo después del inicio de la guerra. Durante ese período –equivalente al de toda la Guerra Fría– las heridas se mantuvieron abiertas, hubo síntomas de gangrena en Tacna y Bolivia y se abrió el apetito geopolítico de algunos estrategos argentinos. Ese cuadro potenció el rol de los militares y rutinizó el de los diplomáticos. Aquellos tuvieron buenos argumentos contra el «pacifismo ingenuo» de los civiles, en la batalla ritual por el presupuesto. Los diplomáticos, por su lado, sólo podían ayudar a mantener el statu quo mediante tareas -visitas, acuerdos, declaraciones conjuntas, condecoraciones– que lucían adjetivas ante los ejercicios castrenses. Diríase que mientras la fuerza tutelaba, la relación con el Perú se administraba y las rup- turas con Bolivia eran «simples» decisiones unilaterales de ese país. * Abogado, periodista y profesor de Relaciones Internacionales de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile. Columnista de La Tercera (Chile), La Vanguardia (Barcelona, España) y Caretas (Perú). Diecinueve libros publicados (filosofía jurídica, ciencia política, reportajes, ensayos y narrativa). Sus últimos libros publicados: El Papa y sus hermanos judíos (2000), Chile: un caso de subdesarrollo exitoso (2002) y Chile-Perú: el siglo que vivimos en peligro. Premio Rey de España 1p84 por la mejor labor informativa. Premio América del Ateneo de Madrid, 1989, por ensayo Crisis de las izquierdas en América Latina ; Premio Internacional por la Paz, 1992, del Ayuntamiento de Zaragoza, por ensayos sobre derechos humanos. Miembro del Consejo Asesor de Políticas de Defensa. Profesor honorario de la Sociedad de Estudios Internacionales, España. Asesor de la Fundación Seminario de Investigación para la Paz, de Zaragoza, España.

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=