Nuestros vecinos
Lorena Oyarzún Serrano 316 medio de intercambios estudiantiles a nivel de secundaria y de educación superior. La Unión Europea, por ejemplo, ha impulsado diversos programas de intercambio estudiantil, uno de ellos es Erasmus. También existen algunos que involucran a Iberoamérica como la denominada «Ruta Quetzal». Otras iniciativas de este tipo y que tienen más larga data son los programas de intercambio estudiantil a nivel global como los promovidos por instituciones como American Field Service (AFS) o Youth For Understanding (YFU), en el que miles de jóvenes de la más variada pro- cedencia tienen la oportunidad de vivir una cultura diferente a la suya. Concientes de que esta es sólo una manera de abordar la relación, se considera necesario implementar actividades que promuevan el conocimiento de nuestros pueblos, los beneficios de una mayor integración económica, energética, pero tam- bién cultural, científica y social. Desde Chile, y unilateralmente, es fundamental adoptar una política de Estado permanente en el tiempo, que tenga como objetivo normalizar las relaciones. Es un proyecto a largo plazo, sobre todo si consideramos que desde los cimientos de Bolivia se está replanteando su modelo estructural. En medio de esta incertidumbre hay algo evidente y es que el primer paso -clave en todo proceso de resolución de conflictos- es reconocer que existe uno. Chile no puede ni debe dejar pasar la oportunidad de solucionar un problema centenario que vicia sus relaciones, tanto por su propio interés nacional y regional, no se trata de un acto altruista. Pertenecemos a esta región y lo que les ocurre a nuestros vecinos nos influye directamente. Es cierto que están en marcha algunos proyectos de cooperación e integración regionales, pero lo significativo es el rumbo político que adquieran. De insertarse dentro de un marco de real cooperación y de benefi- cios mutuos para el Estado y sus ciudadanos, se lograría dar un paso fundamental en aras de alcanzar una mejor calidad de vida para los habitantes de las Américas. Para finalizar recordar unas palabras de Ortega y Gasset: «Sólo cabe progresar cuando se piensa en grande, sólo es posible avanzar cuando se mira lejos». Referencias Archer, C. (1992). International Organizations . Londres/Nueva York: Routledge. Atkins, G. (1989). Latin American in the International Political System. Boulder: Westview Press. Barros Van Buren, Mario (1998) Chile en la Sociedad de las Naciones (el debate con Perú y Bolivia). Disponible en: http://www.uchile.cl/instituto/anales/1998/est2.html. Boersner, D. (1982). Relaciones internacionales de América Latina: Breve Historia . México: Nue- va Imagen. Brecher, M. (1993). Crisis in world politics. Theory and reality. Oxford: Pergamon Press. Burton, J. (1990) Conflict: resolution and prevention. Londres: Mcmillan. Connell-Smith, G. (1996). The Interamerican System . Londres: Oxford University Press. Fawcett, Louise y Hurrell, Andrew (eds.) (1995). Regionalism in World Politics. Regional organization and international order . Oxford: Oxford University Press. Figueroa Pla , U. (1991). Organismos Internacionales. Santiago: Editorial Jurídica de Chile, pp. 449-475. ______________. (1992). La Demanda marítima boliviana en los foros internacionales. Santiago: Andrés Bello. Fisas Armengol, V. (1987). Introducción al estudio de la paz y de los conflictos. Barcelona: Editorial Lerna.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=