Nuestros vecinos
Lorena Oyarzún Serrano 304 La precariedad del vínculo no deja de sorprender, si se considera la potenciali- dad de complementación que ambos podrían desarrollar en ámbitos sociales, eco- nómicos y políticos. No sólo poseen un legado histórico común, idioma y son fron- terizos, también comparten la procedencia de algunos de sus habitantes origina- rios, los aymara y quechua. Asimismo, se han producido constantes flujos migratorios desde Bolivia hacia Chile, tendencia que va en aumento, sobre todo al darse situa- ciones de crisis, lo que obliga a ambos países a afrontar un flujo migratorio que por ahora no parará. Se considera relevante reflexionar sobre el estado actual de la relación bilateral, utilizando un enfoque más global, abierto y sin sesgos nacionalistas, ya que la dis- cordia ha traspasado fronteras, provocando tensiones en la región y convirtiéndose en un obstáculo para lograr mayor cohesión en América del Sur. La idea es descu- brir qué caminos en el marco del sistema de post-Guerra Fría son viables y eficaces para mejorar sus lazos, basados, hasta el día de hoy, en la desconfianza y en una lógica de «suma cero». Una aproximación al desarrollo de la relación bilateral en el sistema americano Desde los orígenes de su vida independiente los Estados americanos han desa- rrollado diversas iniciativas tendientes a consolidar espacios de cooperación políti- ca y económica, distinguiéndose tres etapas 2 . La primera, denominada Hispa- noamericanismo se extendió desde principios del siglo XIX hasta la Primera Con- ferencia Internacional Americana (1889-1890), celebrada a instancias de Estados Unidos para aumentar su comercio con el continente. Este periodo se caracterizó porque los nuevos estados buscaron establecer una política común frente a las potencias extranjeras, defender su soberanía, lograr su legitimación y crear un sis- tema que les otorgara gobernabilidad. En este período, y contrario a lo que se podría suponer, se enfrentaron en dos ocasiones Bolivia-Perú contra Chile. En 1836 debido al proyecto de unión de am- bos Estados que en Santiago fue percibido como una amenaza y que desencadenó en la guerra contra la Confederación Perú-Boliviana. Posteriormente, en la Guerra del Pacífico (1879-1883), que derivó en que el gobierno de La Paz entregara a Chile 120 mil kilómetros cuadrados de territorio y aproximadamente 400 kilómetros de costa, perdiendo con ello su cualidad marítima 3 . Perú, en tanto, tuvo que ceder la 2 Véanse Figueroa Pla, U. (1991), Organismos Internacionales. Santiago: Editorial Jurídica de Chile, pp. 449-475; Saínz, N. (2000), Tres modelos de Cooperación en América: la OEA, GR y Mercosur , próxima publicación, Barcelona. Sobre las instituciones latinoamericanas tam- bién se puede consultar Atkins, G. (1989), Latin American in the International Political System . Boulder: Westview Press; Boersner, D. (1982), Relaciones internacionales de América Latina : Breve Historia. México: Nueva Imagen; Connell-Smith, G. (1996). The Interamerican System . Londres: Oxford University Press. 3 Bolivia ha sufrido una significativa disminución de su territorio desde que nació a la vida independiente con una superficie de 2.343.764 Km2, disminuyendo a 1.095.435 Km2. Algu- nas de las pérdidas territoriales se han debido a conflictos bélicos y otras a la suscripción de Acuerdos.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=