Nuestros vecinos

Francisca Möller et al. 296 ción de principios señala, que su principal objetivo es: «Promover el desarrollo y la internacionalización económica de la región, actuando como bloque frente a los mercados del mundo, impulsando un crecimiento geográficamente armónico en nuestro continente» 14 . Existen, además de lo comercial y económico, otros ámbitos de la cooperación que también requieren del decidido apoyo del Estado. La educación es uno de ellos. Debería potenciarse la celebración de convenios entre instituciones académicas nacionales, especialmente las que se ubican en las zonas fronterizas, y sus contra- partes al otro lado de la frontera. A través de estas iniciativas, podrían conseguirse efectos beneficiosos para los dos países. Desde aquellas que promuevan el conoci- miento y el desarrollo de confianzas mutuas, hasta proyectos de investigación cien- tífica y tecnológica cuya preocupación sea la resolución de problemas compartidos. En efecto, en la actualidad existe un organismo denominado Consejo de Rectores por la Integración de la Subregión Centro Oeste de Sudamérica, que se dedica a «la integración y colaboración interuniversitaria, estando constituido por universida- des del noroeste de Argentina (Jujuy, Salta, Santiago del Estero, Tucumán, Catamarca y la Rioja), de toda Bolivia, del norte de Chile y sur del Perú, representadas por sus rectores» 15 y que tiene por finalidad «profundizar el camino de la integración de los pueblos de Sudamérica y en particular, de la subregión centro oeste, con el propósi- to de ampliar las bases de la cooperación académica, científico-tecnológica y cultu- ral entre las universidades ubicadas en la referida zona geográfica». 16 En síntesis, estos son sólo algunos ejemplos de las muchas ideas y proyectos que pueden surgir de las inquietudes de la comunidad que vive en las zonas fronterizas y que no requiere para ello de intervención estatal. El rol del Estado, en lo referido a su fomento y apoyo, es una herramienta fundamental para el efectivo y eficaz desarrollo de una política de cooperación transfronteriza. Las iniciativas vigentes no hacen más que demostrar que cuando existe voluntad, la cooperación puede concretarse y transformarse en una realidad. Sin perjuicio de ello, el Director Ejecutivo de la Comisión Asesora Presidencial para la Cooperación Internacional en Regiones, ha manifestado que «el actual esquema de cooperación con la Unión Europea ni con ningún otro bloque o país se contempla el desarrollo de agendas subregionales específicas (es decir que tiendan a favorecer las potencialidades regionales y buscar un equilibrio en el desarrollo de las distintas regiones administrativas de nuestro país) ni los mecanismos de coordi- nación apropiados para la elaboración e implementación de dicha agenda... cuan- do nos encontramos iniciativas de cooperación regional existentes, estas se llevan a cabo por acciones independientes, de diversas entidades sectoriales dentro de cada región, sin disponer de información sobre las actividades que se llevan a cabo en otros ámbitos o regiones y otros sectores» 17 . Pese a que este diagnóstico se refiere a 14 GEICOS, Declaración de Principios, Cámara de Comercio Exterior de Salta, http://www.cam - comexsalta.com.ar/seccion.php?ids=1874. 15 http://www.ucsm.edu.pe/criscos/ 16 Rhi-Sausi, José Luis, op. cit. , p. 4. 17 R. León, Roberto R., Director Ejecutivo, Comisión Asesora Presidencial para la Cooperación Internacional en Regiones, «Diseño de agendas regionales de cooperación internacional en el

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