Conceptos de género y desarrollo
como en el mercado y por ello otorga gran importancia a la independencia económica como avance hacia la equidad. Una de sus preocupaciones básicas es la desi– gualdad existente entre hombres y mujeres en las esferas públicas y privadas, por ello propicia una modificación legisliltiva que reconozca la igualdad de unos y otras. La lógica implícita de este enfoque es que en el proceso de desarrollo las mujeres han perdido terreno respecto a los hombres, por lo tanto para restablecer un cierto equilibrio, estos deben perder para que las mujeres ganen. Evidentemente este enfoque recibió múltiples acusaciones, por ejemplo de partir de definiciones uni– versales y esencialistas de hombres y mujeres, sin tener en consideración por ejemplo factores de clase, que afectan tanto a unos y otras provocando situaciones diferenciadas. Por otra parte, se le acusó de estar más preocupado de reflejar las preocupaciones de igualdad de las feministas del Primer Mundo que del desarrollo y la situación de las mujeres del Tercer Mundo. Este enfoque recibió críticas de diferentes lados, las agencias de ayuda consideraron que interfería en las tradiciones culturales de cada país, los gobiernos de los países del Tercer Mundo lo vieron como una intromisión feminista. Sin embargo, pese a que no tuvo aceptación a nivel de agencias y gobiernos este enfoque fue aprobado oficialmente en 1975 y aunque ha sido dejado de lado por la mayoría de las agencias, continúa proporcionando un marco a quienes trabajan en los gobiernos, para mejorar el status de las mujeres a partir de una legislación oficial, que no siempre tiene correspondencia en la realidad donde sigue pesando la costumbre. 75
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