Salud mental y contrainstitución

Otro de los mitos que sostiene tiene relación a los valores institucionalizados que en la escuela se pueden medir. "Las escuelas pretenden desglosar el aprendizaje en materias, para incorporar en el alumno un currículum hecho con estos ladrillos prefabricados, y para medir el resultado con una escala internacional"13. Los aprendizajes son estandarizados y medidos por escalas que nada tienen que ver con el niño en cuestión. El proceso de apropiación de los aprendizajes no se considera y no es medible mediante un currículum, el cual es impuesto para que los docentes den cuenta de éste en aulas. Por 10 tanto, los niños que no se ajustan al currículum y no aportan al desarrollo de éste, son los niños conflictivos, centro de intervenciones o decisiones del equipo de gestión de un colegio. La experiencia del taller de Circo por un lado demuestra que no es necesario estandarizar el aprendizajt;:, y por otro oferta un espacio de libertad y de apropiación por parte de los niúos, quienes proponen darse a conocer en una presentación frente a toda la comunidad escolar, como una forma de mostrarse y validarse desde otro lugar, y así ser percibidos más allá de un rótulo. "Las personas que han sido escolarizadas [... ]. Para ellas, 10 que no puede medirse se hace secundario, amenazante. No es necesario robarles su creatividad. Con la instrucción han desaprendido a 'hacer' lo suyo o a 'ser' ellas mismas, y valoran sólo aquello que ha sido fabricado o podría fabricarse"14. Para Illich, la institución escolar es un reflejo de la sociedad imperante, las leyes de mercado se establecen como reguladoras de las relaciones de las personas. En la relación entre alumno-profesor dentro del aula, se observa al profesor como un distribuidor de un producto terminado al consumidor, el alumno no forma parte en el proceso de fabricación del conocimiento, delimitando su actuar acorde a una estructura escolar. Nuevamente da cuenta de cómo las instituciones nos habitan y van constituyendo sujetos acordes a la sociedad imperante. ¿Cuál es el valor de un taller de Circo dentro de una institución? El taller posibilita un espacio de creación y expresión subjetiva a cada integrante, apropiándose de su deseo en la producción de una saber hacer con elementos ofertados dentro de una dinámica grupal. Un lugar de intercambios de ideas, pensamientos, sentimientos, emociones y por qué no decir de versiones de la historia individual familiar. La vinculación de un niño con prácticas artísticas, le brinda la oportunidad de crear una aventura que permite al sujeto desplegarse en su acto artístico. En el taller de Circo, la propuesta apunta (entre otros objetivos) a la posibi– lidad de interactuar socialmente desde otro lugar, despojándose del rótulo de niños conflictivos, ya que permite y facilita el contacto y la comunicación con 13 L Illich, ibid, p. 60. 14 I. Illich, ibid, p. 60. 67

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