Palabra dicha: estudios sobre género, identidades, mestizaje

la construcción cultural del género adentrándose en algunas de las dimensiones s i1nbólicas que "la madre" o lo "maternal" han tenido en esas nuchas politicas. Sin lugar a dudas la representación simbólica de LaMadre ha sido horizonte y soporte de un sinnúmero de organizaciones y movilizaciones en Chile. Nuestra hipótesis es que ello es posible toda vez que la cultura 1nestizaha elaborado una construcción simbólica del género en donde la categoría de lo femenino es sinónimo de madre y la de masculino de hijo o padre ausente 12 • Por oh·o lado, lo femenino-madre tiene un correlato poderoso en el universo religioso endonde no es precisamente la figura deCristo (histórico ymasculino) la que domina el culto popula1~ sino la imagen deMaría, la Madre, la Virgen. De estamanera lo mate1no como principio de orden -en cuanto género, del orden de lo cotidiano y en cuanto deidad, del orden de lo sobrenatural- es un hecho cultural' 3 compartido. El que se instale lo materno y LaMadre, como un símbolo del orden cultural, no s ignifica que no existan otros elementos -como el Estadio- que organicen y estructuren el orden social. Lo materno apela, desde nuestra óptica, a un orden arcaico que nos fundó en la bastardía (en lo ilegítimo), La Madre es sutura y abe1tura de la herida del mestizaje, pero, sobre todo las alegorías marianas son la reparación de los linajes truncos y la posibilidad de una identidad de origen 14 • Así, lo 1naternorepresenta la instancia primaria de relación: "El vínculo con la 1nadre es enteramente pre-reflexivo, no se forma a través de un acto de toma de conciencia, sino en aquella experiencia cuyo núcleo originario llamamos justamente presencia. La madre nos retrotrae, en efecto, al origen, tal como la fe en un Dios creador: en el 01igen hay una presencia" 15 • Así, en el imaginario colectivo entendido como el conjunto de representaciones que explicitan la cultura de nuestra sociedad 16 , la imagen de LaMadre ocupa un lugarfunda1nental. De ese modo cuando hablamos de La Madre o lo maternal estamos aludiendo a "atributos", a configuraciones y no a situaciones miméticas con lo real, o dicho de otra manera cuando decimos, por ejemplo, que nuestra cultura mestiza catego1iz.a a toda mujer como madre, ello no implica que "lo madre" se realice en lo purainente biológico sino que se ancla sobre todo en las conductas sociales. Los ruidos maternos y la oposición orden/caos. Lacentralidaddel símboloMadre en laconfonnacióndel imaginario social chilenoqueda de manifiesto cuando emerge en e l á1nbito de la calle, de lo público, de lo político, enarbolado por distintas clases sociales y por posiciones políticas de naturaleza opuesta. Pode111os decir que la alegoría 111adre aparece cada vez que la oposición orden/caos adqu iere realidad en el 81

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