Cosmografia o descripcion del universo

- 132 -· 3 Si sP pregunta a qué distancia se hallan de nosotros las ma~ cercanas de las estrellas, la ciencia tiene nnti poco que <lrcirnos .El diámetro de la Tierra ha serviJ o de medida para computar el de Ja órbita que ella descrihe al re<lroor del sol, i con el dhhnetro de la órbita se han prolongado dcspucs las mensuras hasta los últimos confines de nuestro sistema. planetmio, i aun n1as aUá, siguiendo las huellas de los cometas en sus dilatadas excursiones. Pero entre la mas remota de las órbitas planetarias i la mas cercana <le las estrellas hai t1n golfo inmensurable, cuya anchura (excepto en uoo u otro caso <le que hablarémos luego) no se ha podido ni aun aproximadamente apreciar. Baste decir que mirada una estrella cualquiera desde los extremos opuestos de nuestra órbita, no se perci be la mas pcquE-íia paralaje, ni de un sc>gundo siquiera; de que se cletluce por el cálcu- lo q ue la distancia excede sin duda a 200,000 veces el rudio <lela órbita terrestre; lo cual eqtúvalc a 6 ,900,000,000,000 (seis biJlones i noveeiento;; mil n1illones) de leguas . Cuánto 1na) or sea todavía la distancia, no se sabe. La ima.jinacion se pierde en estos nún1eros• ..A.yudémosla compntando e l tiempo que la luz e1nplt>a en a trave- sar ese espacio. La luz anda como 70,000 leguas por seg11nclo. De- be pues recorrer ese espacio en cerca de 100 millones de segun- dos, esto es, en 1nas de tres años. ¿ Cuál srrá p tt<'S la dk.tancia de las inumcrahles estrellas de la n1as pequeña n1agnitnd c¡ue el teles- coplo desculJrc? Uua estrella de l.ª magnitud necesitaría poner- se, (segun calcula sir J ohu Hersel1e!), a una distancia 362 ve- ces 1nayor que la act ual para que pudiese parecernos de la uéci- n1a sexta magnitud. Por tanto, entre la iuu1ensa mult itud de las estrellas de esta última clase debe haber muchas cuya luz ha) a tar- dado a lo ménos rnil años en llegar a nosotros; de mo<lo que cuan- do ol,serva1110s sus posiciones i uotamos sus val'.ios aspectos, estamos- leyenclo una histo1ia de mas de ruil años de fecha. R ecientemente se han encontrado pa ralajes de est.rcllas fij as por t.res eminentes astrónomos; Bessel de J{onigsberg, Strnvc de Sn11- l'eter$burgo, i Hcntlcrs<. m de E<li11burg·o. La c~trella c,n que ha tra-