Repensando la regulación de las aguas: crisis socioambiental y proceso constituyente

254 GUSTAVO ABRIGO CORNEJO - RODRIGO FUSTER GÓMEZ Págs. 247 - 280 C apítulo II: G estión y gobernanza de las aguas querimientos de la comunidad, por tanto, son los propios usuarios los que deben generar una hoja de ruta sobre las que el administrador trabajará. Para iniciar, el equipo técnico podría estar compuesto por un adminis- trador(a) y un administrativo(a); luego, a medida que la CAS avanza en su desarrollo, podrán sumarse más profesionales al equipo, que contenga ingenieros, abogados, entre otros. La composición ideal de un equipo técnico y su relación con la comu- nidad se muestra en la figura Nº 1. F igura Nº 1: C omposición mínima ideal del equipo técnico asesor en el marco de una CAS Fuente: elaboración propia. De lo anterior deriva otro desafío para las CAS, que es el financiamien- to. Respecto a los costos de mantener un equipo técnico con dedicación completa, el problema se genera en aquellas comunidades que no cuentan con los comuneros suficientes para financiar el presupuesto de la CAS, a partir del valor per cápita de la cuota por concepto de administración. Aunque el CdA establece que el pago de cuotas es en proporción a los de- rechos que cada comunero posee, se podría considerar un cobro diferen- ciado o excepciones a ciertos grupos, por ejemplo, a aquellos que tengan menos de cierta cantidad de caudal otorgado (L s -1 ). Si las condiciones lo

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