Nueva educación pública: evidencia para los desafíos de futuro

Capítulo 21: Considerar las evidencias para proyectar el futuro: una oportunidad de mejora sistémica para evitar que la NEP sea un caso de desarrollo rustrado. 419 Por su relevancia, es necesario reforzar lo que está ocurriendo en el plano de lo propiamente educativo. Como se indicó, los informes del Consejo de Evaluación -ya en dos años consecutivos- han dado cuenta de una valoración positiva del trabajo que están realizando las Unidades de Apoyo Técnico Pedagógico (UATP). Este aspecto, y la forma de trabajo estratégica de los SLEP, tal como se menciona en el capítulo escrito por Camila Jara, Javiera Peña y Lucas Martin, se ha mantenido, pese a la existencia paralela de un conjunto de otras dificultades. Un efecto que parece ser más destacado en este ámbito es el aporte que han hecho las UATP a los equipos directivos de establecimientos de diferente tipo y, en general, el apoyo entregado en procesos de gestión, como lo destaca, entre otros, el capítulo de Sofía Chávez, María José Opazo, Isabel Zett y Fabián Campos y el de Sergio Galdames y Álvaro González. Tal como dijimos, es la lógica de acompañamiento técnico a los establecimientos educacionales la que recibe mayores elogios de parte de los actores educativos y los investigadores, considerando como atributos sus grados de innovaci n -sobre todo en relaci n con sus antecesores municipales- y la pertinencia y aporte al desarrollo de capacidades que el acompañamiento estaría fomentando, especialmente con líderes educativos. Así lo destacaron los trabajos de Vanni y colegas y el de Uribe y Valenzuela. En un ámbito estrechamente relacionado con el anterior, la revisión de los trabajos ya mencionados permite ir proyectando otro rasgo identitario del funcionamiento de los niveles intermedios de la DEP, que está siendo positivamente evaluado con bastante transversalidad: el trabajo colaborativo, especialmente respecto de las redes que se han ido conformando enbase a diferentes temáticas, en que se involucra a diferentes instituciones o a actores en particular. Este tipo de trabajo no tenía un correlato similar en el pasado y se vincula con la posibilidad de generar vínculos y posibilidades de compartir con actores que tienen responsabilidades, desafíos y problemas similares, por lo que también puede relacionarse con el desarrollo de capacidades del propio sistema. Además de los beneficios ya descritos, se plantea la existencia de algunos logros concretos de esta forma de trabajo, por ejemplo, a través de la experiencia del desafío TEP, analizado por Valenzuela, Recart, Contreras, Sánchez, Peñailillo y Espinoza, que concluye con mejoras específicas en el aseguramiento de trayectorias educativas en dos SLEP de la zona centro- sur. Más adelante se profundizará en un conjunto de grandes y difíciles desafíos que se mantienen hasta la actualidad, referidos a la administración del sistema. Sin embargo, como se ha anticipado, es posible identificar algunos logros incipientes desde el punto de vista administrativo, considerando el desarrollo de más, mejores y más claros procedimientos para orientar algunas tareas clave, especialmente aquellos relacionados con los procesos de traspaso de la administraci n de la educaci n. De ello dan cuenta los propios informes del Consejo Evaluador. La NEP, entre problemas sistémicos, contradicciones y debilidades de la implementación. Además de los avances mencionados, el libro es muy claro respecto de diferentes tipos de dificultades que se han manifestado durante estos años de puesta en marcha de la Nueva Educación Pública. Es importante hacer un repaso de ellos a continuación, considerando que una parte de estos corresponden a la gestión de la NEP, mientras otros aluden a debilidades del diseño institucional, a los atributos de la estructura del sistema educativo o sus contradicciones con la reforma. Iniciaremos esta tarea a partir del último tipo de problemas. Tal vez la dificultad que en que se refleja conmayor claridad la relaci n entre los problemas sistémicos con los de la NEP es el del financiamiento. Varios capítulos lo observan con claridad: se hace muy complejo hacer transitar al sistema educativo hacia una condición cualitativamente diferente, si es que no se tiene la voluntad de modificar su lógica mercanitilizada y los correspondientes efectos que ha generado, los que se encuentran latamente demostrados. El capítulo de Sebastián Donoso profundiza en esta dificultad, dando cuenta, además, de la baja proporción del gasto que la NEP respecto del presupuesto del Ministerio de Educación, aspectos que se suman como cortapisas respecto del potencial transformador de la reforma. Otros trabajos, como el de Sofía Chávez y colegas o el de Jennifer Obregón y Juan Carlos Olguín, representan más específicamente los efectos de este profundo problema en algunos niveles y modalidades del sistema educativo, como son la educaci n parvularia y la educaci n media Técnico Profesional, los que se complementan con el claro juicio evaluativo que se presenta en los resultados de la encuesta “La voz de los directores y las directoras”. En definitiva, los

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