Nueva educación pública: evidencia para los desafíos de futuro

366 He invertido tiempo y energía en explicar a mi comunidad educativa en qué consiste la NEP y por qué es importante llevarla adelante 21,6 22,7 29,0 18,0 El equipo docente de mi establecimiento está comprometido con los cambios que implica la Nueva Educación Pública 21,6 22,7 22,4 13,5 Total 29,2 30,9 31,6 21,1 Fuente: Muñoz, Weinstein y Álvarez, 2024. (*) Diferencia estadísticamente significativa al 0,05. (**) Diferencia estadísticamente significativa al 0,09. Valoración de las instancias de apoyo El último eje analizado por esta encuesta se refiere a la valoración que hacen los directores, directoras y docentes encargadossobreelaportequedistintas instancias,medidas y apoyos creados en el marco de la Nueva Educaci n Pública (NEP) han tenido para su labor. Esta dimensión es central, ya que permite observar cómo se traducen los dispositivos institucionales en apoyo efectivo al liderazgo escolar, y qué actores o espacios son reconocidos como significativos en la experiencia de los equipos directivos. Para ello, se pidi a los encuestados evaluar, en una escala de cuatro niveles, cuánto han contribuido positivamente distintas instancias de la NEP a su labor. Los resultados muestran una percepción globalmente positiva, aunque altamente diferenciada según el tipo de apoyo considerado (ver Gráfico 9). Las instancias con mayor valoraci n corresponden a aquellas de apoyo directo a la gestión pedagógica, como el acompañamiento técnico-pedagógico del SLEP (37,3% considera que ha contribuido mucho positivamente), las alianzas estratégicas del SLEP (31,6%) y las redes temáticas (30,3%). Estas cifras sugieren que las acciones con impacto más concreto en la mejora escolar y que implican una relación directa con los establecimientos tienden a ser mejor valoradas por los líderes educativos. En cambio, las instancias colegiadas o consultivas del sistema — como el Comité Directivo Local (CDL), el Consejo Local de Educación Pública (CLEP) y la Conferencia de Directores— son las que reciben las valoraciones más bajas. Por ejemplo, un 44,9% de los encuestados afirma que el CDL no ha contribuido en nada, mientras que para el CLEP ese valor es de 42,1%, y para la Conferencia de Directores, de 22,1%. Esta brecha puede explicarse tanto por una menor visibilidad o funcionalidad efectiva de estas instancias, como por una desconexi n percibida entre estos espacios de participación institucional y las necesidades concretas del trabajo en las escuelas.